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El Pleno del Consell reunido hoy ha dado el visto bueno al anteproyecto de Ley de los Presupuestos de la Generalitat para el próximo año 2016. Tras la reunión del Consell, la vicepresidenta y consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas, Mónica Oltra, y el conseller de Hacienda y Modelo Económico, Vicent Soler, ha explicado las principales líneas que guían estos presupuestos y han destacado que los Presupuestos de la Generalitat para 2016 sientan las bases del cambio del modelo que inspira el nuevo gobierno del Botánico.
Así, los ejes que marcarán el Acuerdo del Bótanico están reflejados en cada una de las consellerias de manera transversal.
El conjunto del Presupuesto de la Administración valenciana para 2016 asciende a 17.155 millones de euros, lo que supone una disminución del 0,2% con respecto al ejercicio anterior.
Cabe destacar la apuesta del Gobierno Valenciano por el apoyo a las personas que más lo necesitan, lo que se traslada en un incremento histórico del presupuesto en políticas inclusivas (dependencia, autonomía personal, renta garantizada de ciudadanía..) con más de un 35% del incremento. Por otra parte, el programa de vivienda experimenta un incremento superior al 110% y se crea una línea de crédito específica para combatir la pobreza energética.
La regeneración democrática es otro de los pilares de este presupuesto, por lo que se asigna una dotación presupuestaria real a la conselleria de Transparencia, Responsabilidad social, Participación y Cooperación, además de incrementar un 6% el presupuesto destinado a la conselleria de Justicia, Administraciones Públicas, Reformas democráticas (que crece un 74%) y Libertades Públicas.
Los Presupuestos de la Generalitat para 2016 están elaborados pensando en las personas. Por ello se incrementa en un 23% las ayudas de becas de comedor, que además estarán abiertos todo el año; se destinan 35 millones a financiar las recetas médicas a pensionistas y personas con renta inferior a 9.500 euros anuales; y en cooperación se pasa de destinar 0,55 euros por habitante a 2,44 euros.
El nuevo modelo productivo que quiere el Gobierno Valenciano se plasma en un nuevo plan de ocupación para jóvenes, con una dotación de 200 millones. Asimismo, se incrementa en un 13% la partida destinada a política industrial, en un 18% las políticas de calidad ambiental y de prevención del cambio climático, y se incrementa hasta un 50% las partidas destinadas a I+D+i.
Como ha destacado el conseller Soler, se ha elaborado un presupuesto propio, como nuevo Gobierno, afrontando el reto de presentar unas cuentas que reflejen la realidad. Es un presupuesto elaborado sobre la base del cumplimiento del techo de gasto y el límite de déficit del 0,3% fijado por el Gobierno Central para el próximo ejercicio.
Así, se han reordenado las prioridades de gasto, apostando por la mejora de la eficiencia y la reasignación de los recursos disponibles. Hay que destacar que en 2016 se va a realizar un esfuerzo muy significativo en el área de sanidad, intentando fijar en la medida de lo posible todas las partidas, para que éstas, desde su origen, estén incluidas en los presupuestos, evitando así gastos sin consignación presupuestaria.
Como ya avanzó el conseller esta misma semana, se confirma que las partidas que más crecen en los Presupuestos para el próximo 2016 son las relativas a la dependencia y la vivienda social, partidas muy importantes, destinadas a cubrir necesidades sociales básicas y esenciales.
Además, desaparecen del presupuesto ingresos que nunca se han materializado, como las enajenaciones de bienes, y se ajustan las previsiones de ingresos por determinados tributos. Los Presupuestos para 2016 reflejan una imagen real de los gastos de la Generalitat y de los ingresos con los que cuenta la Administración valenciana.
Debido a la infrafinanciación que padece la Comunitat Valenciana el Gobierno Valenciano todavía está lejos de conseguir un presupuesto que cubra en su totalidad las necesidades de los valencianos.
En este sentido, el Consell va a seguir reivindicando lo que es de justicia, un nuevo modelo de financiación que permita a esta comunidad dejar de depender de la asistencia financiera del Estado. Y mientras no se implante el nuevo modelo, esta comunidad necesita como remesa de urgencia cerca de 1.300 millones de euros.
