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La reforma de la Constitución del 78 es, según Llanos Massó, candidata de Vox al Congreso de los Diputados, una necesidad perentoria: “La actual Constitución, que tuvo su innegable valor el siglo pasado, necesita reformas que la hagan más acorde con los momentos actuales y que servirá para el progreso de España y, por extensión, de nuestra provincia”.
El primer punto que es necesario reformar: “Hay que ir desmantelando, de manera progresiva, el actual Estado de las Autonomías. Para ello hay que empezar por devolver al Estado las competencias en Sanidad, Educación y Justicia, para evitar que se produzcan, como ahora ocurre, hechos discriminatorios entre distintos territorios”.
Para Llanos Massó: “Hay que ir pasando el poder que tienen las Comunidades a las Administraciones Locales, para acercar, de manera real, las tomas de decisiones que afectan a la sociedad a los propios ciudadanos. Tanto Ayuntamientos como Diputaciones tienen que ser los encargados de velar por las necesidades de los ciudadanos”
El sistema electoral debe reformarse de manera racional: “Las propuestas que defendemos en Vox, van encaminadas a que los diputados salgan elegidos de manera más directa. Nuestra propuesta es que 2/3 sean elegidos en distritos uninominales, por mayoría absoluta, y el tercio restante lo sea en una lista nacional del partido en distrito único. Queremos más cercanía entre el elector y su representante”.
Un aspecto que está lastrando nuestros últimos años son las normativas y diferencias anómalas entre territorios. Para la dirigente de Vox: “Hay que eliminar las normas autonómicas que fomentan la desigualdad entre territorios. No puede tener más beneficios un habitante de Barcelona que uno de Castellón. Así como que tampoco tienen que existir distintas normas de procedimientos que hacen que España sea un galimatías difícil de entender”.
Pero para Llanos Massó hay un hecho incuestionable: En Vox Castellón estamos convencidos qué para salir adelante, hay que empezar a hacer una política efectiva de eliminación de entes autonómicos superfluos, acompañada de una reducción drástica de empresas públicas de dudosa eficacia y que, en la mayoría de los casos, sirven para dar cobijo a estómagos agradecidos”.
Finalizó diciendo: “Estas reformas que proponemos redundarían en beneficio de nuestra provincia, sin ninguna duda”.
