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Castellón fumigará el cauce del río Seco después de obtener la autorización de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), organismo titular del río, para ejecutar los trabajos. El Ayuntamiento de Castellón ha decidido asumir el coste de esta actuación "por el interés estratégico que tiene esta medida para mitigar la presencia de mosquitos tigre especialmente en zonas como el campus de la Universitat Jaume I y los barrios colindantes", según ha explicado la concejala de Salud Pública, Mary Carmen Ribera.
El Ayuntamiento de Castellón ha adoptado esta decisión para garantizar el tratamiento en un río que por sus características "es frecuente el encharcamiento en distintos tramos, originándose pequeñas pozas, que en caso de lluvias pueden constituir focos de mosquitos". "Es la primera vez que se toma la iniciativa desde el Ayuntamiento para poder actuar en el cauce del río Seco y contribuir así a minimizar los posibles focos", ha insistido Ribera.
La concejala responsable del área de Salud Pública ha explica que, según el informe remitido por el Ayuntamiento de Castellón a la CHJ, "las actuaciones consisten básicamente en realizar prospecciones continuas sobre los focos de mosquitos catalogados, aplicando tratamientos larvicidas en el momento oportuno y evaluando después los resultados de los tratamientos". Este mismo documento añade que "los tratamientos se complementarán, solo en casos justificados, con otros adulticidas, que serán igualmente realizados con insecticidas adecuados y seguros para los ciudadanos y el medio ambiente".
"Desde el Gobierno municipal entendemos que todas las medidas que contribuyan a minimizar la presencia de mosquitos y, por tanto, a reducir las molestias que sufren los ciudadanos son importantísimas. Los tratamientos biocidas que aplicamos a diario en el término municipal se reforzarán ahora con esta actuación en el cauce del río Seco, donde no se puede intervenir sin la autorización de la Confederación", ha afirmado la responsable del área de Salud Pública.
La autorización concedida por la Confederación Hidrográfica del Júcar permite "los trabajos de aspiración con motobomba en zonas encharcadas y los necesarios para la aplicación de tratamientos con los productos en varios tramos de cauce, en zonas urbanas y periurbanas propuestos sin presencia de fauna acuática, en suelos encharcados y vegetación asociada a estos ambientes como cañares, al igual que en los puntos de conexión del alcantarillado de aguas pluviales". Todos los trabajos serán supervisados por el Servicio de Policía de Aguas y Cauces Públicos de la CHJ.
Esta actuación se suma al tratamiento habitual que se aplica durante todo el año tanto en áreas urbanas como del término municipal y al primer plan biológico de lucha contra mosquitos que se pondrá en marcha este mismo año. El pleno del Ayuntamiento de Castellón también ha aprobado de manera provisional la ordenanza para el control del mosquito tigre, ahora en fase de exposición pública, y que regula las medidas que a nivel particular deben tomar los ciudadanos para reducir la posibilidad de que aparezcan focos. Estas medidas se centran en evitar el estancamiento de agua en objetos situados al aire libre, en platos de macetas, piscinas, etcétera.
El PP pide una pasarela sobre el río
Por su parte el concejal del Grupo Municipal Popular, Carlos Feliu, ha pedido a la alcaldesa que "haga ya la pasarela ciclo-peatonal sobre el río porque ahora hay dinero y los niños que estudian en centros situados en ambos márgenes siguen cruzando el río por una senda peligrosa".
Y es que el pasado 23 de abril el bipartito dio a conocer el superávit 2015 que iba a destinarse a obras financieramente sostenibles, unos 8,7 millones de euros.
En el Pleno del 26 de abril el Grupo Municipal Popular ya puso sobre la mesa una batería de obras necesarias para la ciudadanía de Castellón y que se distribuían por todo el territorio, tales como la pasarela ciclo-peatonal sobre el Riu Sec en el Raval Universitari, una estación de bombeo en el Grupo San Agustín y San Marcos, el adecentamiento del entorno del Polígono Emilio Fabregat en el Grau o varias obras de mejora de la comunicación de los grupos periféricos con la ciudad.
Aquella iniciativa del PP no prosperó y el bipartito justificó su rechazo en que ya estaban trabajando, aunque ya anunció que no le gustaban las obras "de pico y pala" y que estaban pensando en "obras de infraestructuras del conocimiento o en obras de políticas sociales o en actuaciones de otro tipo".
El Grupo Municipal Popular cree que los alumnos y vecinos que viven en el Raval Universitari o en la carretera de Alcora y que actualmente están atravesando el cauce del Riu Sec por una senda muy peligrosa se merecen una "obra de pico y pala".
Para Feliu "se trata de una obra emblemática y muy necesaria como ya pusieron de manifiesto el año pasado los vecinos que unieron con una cadena humana ambos márgenes del río, convocados por las asociaciones de Raval Universitari y de Maset Blau".
Actualmente, numerosas personas, muchas de ellas estudiantes menores de edad, cruzan el lecho del río accediendo al mismo, por la parte de la carretera de Alcora mediante la vía pecuaria muy deteriorada que da acceso al cauce y por la parte del Raval Universitari por una senda de paso realizada por los propios transeúntes sobre el margen escarpado y muy peligroso. Tampoco hay iluminación ni seguridad en la zona "y el vallado y prohibición del paso no es la solución ya que todos los intentos han sido vanos e inútiles".
Feliu insiste en que "dada la envergadura de la obra ya debería estar anunciado para poner en marcha toda la maquinaria de un proyecto que solucionará uno de los grandes problemas del Raval Universitari. Hay necesidad, hay demanda social y hay dinero, no sabemos por qué el bipartito sigue mudo".