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El Ayuntamiento de Benicàssim ha anunciado que impulsará cinco nuevos proyectos de remodelaciones y mejoras urbanas con el remanente del presupuesto de 2015 fruto de la gestión económica del pasado ejercicio a los que se destinará 44.000 euros. Susana Marqués ha apuntado que “con esta última fase hemos conseguido ajustar más de 2,5 millones de euros que obtuvimos del superávit de la gestión económica para destinarlos a beneficio de los ciudadanos, mejorando calles, aceras, canalizaciones, infraestructuras de agua y renovación de alumbrado, entre otras. Gracias a este fuerte impulso inversor, año a año conseguimos que Benicàssim tenga una mejor calidad urbana para el disfrute de sus vecinos”. Una de las mejoras más demandadas de los vecinos es la prolongación de la barandilla de seguridad del colegio Palmeral.
De esta manera, el pleno ordinario del próximo viernes deberá aprobar este último paquete de remanentes que asciende a 44.000 euros y que incluye cuatro proyectos que se habían retrasado en su cuantificación. Los proyectos a ejecutar incluyen mejoras en la zona del Torreón, las últimas obras de acondicionamiento del edificio del ayuntamiento, la mejora de los caminos rurales y una de las obras más demandadas por los vecinos como es la prolongación de la barandilla de seguridad del colegio Palmeral.
Así, los padres y madres de los alumnos del colegio Palmeral habían solicitado a través de los presupuestos participativos, la mejora de la seguridad en la movilidad de sus hijos a la salida y entrada del centro prolongando la barandilla de seguridad que impide el acceso directo a la calzada. Ahora, gracias a este paquete de inversiones, se podrá ejecutar este proyecto que supondrá un coste de 8.500 euros, pero que, como ha señalado Marqués “era de vital importancia para garantizar a los padres y docentes una mayor seguridad en el transito de acceso al colegio”.
Por último, otro de los proyectos más importante de este segundo grupo de inversiones es la reparación de varios caminos rurales del municipio, entre ellos, el camino de acceso a la Font Tallà. Susana Marqués ha apuntado que “estos trabajos también son el cumplimiento a las demandas de ciudadanos que nos pedían que actuáramos para mejorar el acceso a esta fuente tan emblemática del paraje natural. Ahora, debemos solicitar los correspondientes permisos por encontrarse en zona protegida, pero una vez obtenidos, la vocación es hacerlo más cómodo para los usuarios”.
