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El departamento de Servicios Sociales de Almassora ha iniciado el proyecto de colonias urbanas y escuela de verano que garantiza una comida diaria a los hijos de familias en riesgo de exclusión social sin que el resto de sus compañeros del curso perciban diferencias. Hasta 70 niños de 41 familias participan en esta iniciativa que se desarrolla en el colegio Cardenal Cisneros hasta el próximo 28 de agosto.
El Ayuntamiento de Almassora enmarca este programa en las actividades estivales de ocio y tiempo libre. Así, los pequeños participan en talleres y juegos de 9.00 a 16.00 horas al tiempo que el programa les asegura la alimentación básica en el periodo estival en un entorno de educación en valores por la igualdad, la integración, la tolerancia y la paz. Los participantes tienen entre 0 y 16 años.
La iniciativa parte del departamento de Servicios Sociales y cuenta con el respaldo de las concejalías de Juventud y Educación. La financiación del proyecto, valorado en 14.364 euros, es conjunta entre la Conselleria de Bienestar Social (11.900 euros) y el Ayuntamiento de Almassora (2.464 euros). El presupuesto incluye los gastos de alimentación y los derivados de las actividades educativas y de ocio.
Entre los objetivos del proyecto figura también la convivencia en un ambiente de igualdad de género en el trato y ayuda al prójimo, valorando positivamente las características diferenciales de las personas con las que conviven. Los monitores les enseñan, además, a ser autónomos en aspectos de su vida diaria: aseo personal, alimentación y cuidados del cuerpo.
Al margen de los educadores y coordinadores del programa, éste cuenta con un trabajador social y un psicólogo para atender las necesidades específicas de los pequeños con problemas. No en vano, tal como ha recordado la concejala de Bienestar Social, Diana Belliure, “se valora positivamente la posibilidad de poder ofrecer a un colectivo de familias desfavorecidas con necesidades muy concretas la cobertura de las mismas y, simultáneamente, la integración con el resto de menores en un ambiente de igualdad”. “No queremos colas de pobres ni guetos”, ha insistido Belliure.
