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El Ayuntamiento de Almassora ha ofrecido a los artistas locales la posibilidad de realizar una subasta pública con obras relacionadas con la ermita de Sant Josep de l’Horta para recaudar fondos con los que restaurar la capilla. Alrededor de una decena de especialistas en diferentes disciplinas han confirmado ya su intención de participar en esta exposición y compra-venta que destinará la recolección al mantenimiento del patrimonio local.
La idea partió de la asociación que lleva el nombre de la ermita como una forma de recaudar fondos para continuar restaurando el ermitorio que se encuentra entre la costa y el casco urbano. El consistorio se brindó a convocar a los artistas a una reunión presidida por la concejala de Cultura, Isladis Falcó, que les expuso el proyecto recientemente y les ofreció el Espai Mercat como sala de exposición y venta de las piezas donadas durante las fiestas de Santa Quitèria.
La iniciativa cuenta ya con el apoyo de una decena de artistas especializados en diferentes disciplinas: pintura, dibujo, fotografía y bellas artes en general que harán posible esta propuesta. Cada uno de ellos donará una obra relacionada con la ermita de San Josep de l’Horta para que vecinos y visitantes puedan comprarlas. El Ayuntamiento de Almassora ha fijado como requisitos que las piezas no superen una medida estándar de 30x40 centímetros sin enmarcar y que el precio de venta al público oscile entre los 100 y los 150 euros.
El departamento de Cultura ha recalcado que los artistas pueden expresar en las obras donadas, que pueden ser nuevas o restauradas, algún lugar interior o exterior del paraje de la ermita. Para participar únicamente tienen que trasladar su petición a la concejalía del área y entregar su trabajo alrededor del 10 de mayo, para que la muestra sea inaugurada tras el Pregó de las fiestas en honor a Santa Quitèria, previsto para el día 14.
Los donativos se destinarán íntegramente a realizar mejoras en un templo que celebrará su 104 aniversario este verano y que sufre las fisuras y el deterioro propios del paso del tiempo. La contribución popular rememorará la construcción altruista de la capilla por parte de los vecinos, que en su día aportaron animales y aperos de labranza para alzar la ermita en el cruce del Camí Benafelí y la travesía de Sant Josep, en plena huerta de Almassora.
