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La Conselleria de Infraestructuras ha ratificado esta mañana al equipo de gobierno de Almassora que el próximo lunes 21 tendrá lugar la adjudicación definitiva de las obras del colegio Regina Violant. La propuesta de adjudicación que firmará el Consell será la de la empresa Torrescámara y cía S.A. cuyo presupuesto de ejecución es de 5.169.399,62 euros, según refiere el gabinete autonómico. El proceso continuará a principios de 2016 con la firma del contrato con la constructora y el inicio de los trabajos.
La propuesta de Torrescámara sustituye a la del Grupo Bertolín comunicada en su día por el gabinete autonómico por ser la oferta de mayor puntuación, si bien fue desechada tras analizar posteriormente que la plica económica superaba el límite de reducción presupuestaria respecto a la base de licitación. Cabe recordar que la Administración valenciana fijó en 6.929.490,11 euros el importe máximo de las obras, una oferta que, si no hay contratiempos, se verá reducida finalmente en 1.760.090,49 euros.
El colegio, que se alzará en el solar del antiguo campo de fútbol La Garrofera, contará con tres líneas educativas formadas por 9 unidades de Infantil, 18 de Primaria y un comedor escolar sobre una superficie construida de 7.127 metros cuadrados. El recinto incorporará el pabellón B del polideportivo municipal, si bien el proyecto incluye un acceso externo con vestuarios diferenciados para evitar molestias a los usuarios.
Para la alcaldesa de Almassora, Susanna Nicolau, “la noticia de la inminente adjudicación acaba con un proceso larguísimo para estudiar las 40 ofertas presentadas por las empresas y comporta el inicio de las obras a principios de 2016”. “Confiamos en que se cumpla la palabra del Consell, que sin duda sería el mejor regalo de Navidad para Almassora tras tantos años de reivindicaciones y maltrato a la comunidad educativa del Regina Violant”, ha señalado la concejala de Educación, María José Tormo.
No en vano, el centro empezó su andadura en barracones en el verano de 2006 con seis módulos prefabricados y acabó ese primer trimestre de actividad con 123 alumnos. Nueve años y medio después, y con un traslado de por medio, la comunidad educativa supera los 560 estudiantes en un recinto repleto de aulas provisionales.
La adjudicación definitiva de las obras se produce un mes después de que la junta de gobierno del Ayuntamiento de Almassora aprobara la concesión de licencia ambiental a la Conselleria de Educación para la instalación del colegio con arreglo al proyecto redactado por los técnicos en enero de este año. En los mismos términos, el consistorio concedió permiso indefinido de vertido a la red de saneamiento municipal según las características acordadas.
