La jornada festiva de hoy arranca después de una noche animada y participativa. El pasacalle de disfraces organizado por la concejalía de Fiestas y la Junta Local de Fiestas movilizó ayer noche a más de 500 personas que participaron en él superando las previsiones de asistencia. Tal y como ha declarado el regidor de Fiestas, Arturo Soler, quien también ayer se disfrazó junto a otros miembros del equipo de gobierno, “el éxito es de los vecinos participantes, que con su respuesta han conseguido que esta primera edición se consolide y entre a formar parte de los actos de la programación”.
Almassora ha cumplido un año más con la tradición y ha congregado a su parroquia en la plaza de la Iglesia de la Natividad de Nuestra Señora para partir en romería hacia el paraje de Santa Quitèria. Historia, tradición y fe han vuelto a darse la mano en un evento popular que sobre las 8.30 horas concentraba en la Vila a centenares de vecinos, muchos de ellos conduciendo los típicos vehículos engalanados.
Al toque de las campanas y al ritmo de ‘dolçaina i tabal’, la reina de las fiestas, Laura Alguacil, y su Corte de Honor, acompañadas por las autoridades municipales, han guiado a los romeros hacia el paraje de la patrona en una romería en la que los asistentes han tenido la oportunidad de adquirir la tradicional cinta roja, de la que se han ofrecido hasta 5.000 ejemplares, y la pañoleta de la patrona, de la que se distribuirán 500 unidades. La recaudación que se obtenga de la venta, un euro por cinta y tres euros por pañuelo, irá destinada, como todos los años, a una organización solidaria de la localidad.
“El de hoy es un acto multitudinario, en el que Almassora se reafirma como pueblo y reivindica su identidad”, ha señalado Vicente Casanova, alcalde de Almassora. Acompañado por el mantenedor de las fiestas, Primitivo García, el cura párroco de la Natividad, Vicente Agut, la diputada autonómica Maira Barrieras, así como por el primer teniente de alcalde, Luis Martínez, y el concejal del ramo, Arturo Soler, “son muchos los que hoy acuden a Almassora para disfrutar de un día de hermandad, un día en el que las familias y amigos se reencuentran”.
A la llegada al paraje, la población ha tenido la oportunidad de degustar el tradicional “rollet i copeta”. Siete mil dulces, regados con 180 litros de mistela, que han dado la bienvenida a los romeros y también a los vehículos engalanados, que han recibido un distintivo por su participación.
Un parque infantil y a las 12.00 horas la santa misa en honor a la patrona conducirá a los romeros hacia el mediodía en el que se ha previsto elaborar una paella monumental para todos los participantes gracias a la colaboración de CaixAlmassora.
Llegada la tarde, a las 18.00 horas, los romeros partirán de nuevo desde el paraje para dirigirse hasta el municipio, en esta ocasión, acompañando a la patrona. La imagen de Santa Quitèria saldrá de su ermita en la que reside a lo largo de todo el año y solo abandona para festejar con su parroquia las celebraciones que en su honor. Un traslado que vendrá flanqueado por las tradicionales hogueras, que se encenderán al paso de la imagen. Desde hoy domingo y hasta el próximo 2 de junio, la venerada santa residirá en el casco urbano junto a sus vecinos, primero en la iglesia del Santísimo Cristo y, posteriormente, en la iglesia de la Natividad de Nuestra Señora.
Resultados del fallo de los premios de vehículos engalanados (romería) y pasacalle disfraces (sábado noche). Vehículos engalanados: 1. Anem i no arribem. 2. El Racó. 3. La Pirula. Pasacalle de disfraces: Disfraz de grupo: El Refugio como Cazafantasmas. Disfraz individual: Tots Tancats como Taco de billar. Peor disfraz: La Colla.
