Castellón Información
Los funcionarios del Juzgado de Paz de Almassora trabajan, desde el pasado viernes, en la nueva ubicación de las oficinas, en la planta baja del Ayuntamiento de Almassora. El traslado desde el sótano a este punto, con acceso directo desde la calle, ha permitido la eliminación de barreras arquitectónicas en el acceso a esta instalación.
Los trabajos para el cambio de ubicación comenzaron después de Navidad y han supuesto la instalación de unos paneles separadores de cristal que también albergan el cableado en el soporte que los sujeta al suelo. La creación de estas estructuras ha supuesto el trabajo coordinado y en dos fases de los operarios de cristalería y los responsables de la instalación eléctrica. La colocación de los paneles finalizó a principios de la pasada semana, momento a partir del cual comenzó el traslado de mobiliario, archivos y material de oficina por parte de los trabajadores del Juzgado de Paz.
La musanza a la planta baja del ayuntamiento ha sido solicitada en numerosas ocasiones durante los últimos años por el juez al frente del servicio, Enrique Felip, quien consideraba que el sótano era un punto de difícil acceso para los vecinos con movilidad reducida. El importe total de los trabajos asciende a 5.000 euros, una cantidad que, el regidor de Actividades, Roger Beltrán, considera “plenamente justificada, puesto que permite que persona mayores o minusválidos puedan hacer uso de este servicio público en las mismas condiciones que cualquier otro vecino”.
Cabe recordar que este espacio de la planta baja acogía la celebración de enlaces matrimoniales, que desde principios de año se realizan en el salón de plenos del primer piso, al cual es posible llegar utilizando los ascensores con los que cuenta el ayuntamiento. “El volumen de personas que acuden al juzgado es sensiblemente superior que el de personas que asisten a bodas. Este cambio busca el bien de la mayoría y muchos vecinos lo agradecerán”, ha concluido Beltrán.
