Castellón Información
La candidata a las primarias socialistas de Castellón, y actual portavoz en el Ayuntamiento, Amparo Marco, ha firmado el Código Ético del PSOE impulsado por el secretario general, Pedro Sánchez, para los cargos públicos y orgánicos. “La corrupción causa un enorme daño a la democracia. Quienes nos dedicamos a la política debemos dar ejemplo constante en la defensa de la ética pública, el uso correcto de los recursos y la transparencia”, añade.
Marco insiste en la idea de 'tolerancia cero' con la corrupción y aboga por establecer los mecanismos legales y normativos necesarios para afrontar la corrupción en el ámbito municipal. En ese sentido, defiende la conveniencia de articular también un verdadero código de buen gobierno municipal en el que se contemplen los requisitos éticos para los miembros de la Corporación y, de otro lado, las sanciones políticas ante su incumplimiento.
“La ciudadanía está exigiéndonos una nueva forma de hacer política basada en la ejemplaridad, la transparencia y la rendición de cuentas. Debemos ser sensibles y respetuosos con esa exigencia y establecer los mecanismos necesarios en las instituciones para que no haya ni una sombra de sospecha sobre las personas que gestionan el dinero público”, apunta.
El PSOE hizo público el sábado su nuevo Código Ético, que exige "honradez" a afiliados y cargos e incorpora compromisos concretos para todos sus cargos: no podrán recibir regalos de más de 60 euros, tendrán que informar sobre dietas y gastos de representación, cuya cuantía se limita, y deberán viajar haciendo uso siempre de la tarifa "más económica".
Asimismo, fija la actuación del partido ante la implicación de socialistas en procedimientos judiciales: desde ahora, los imputados deberán dar cuentas ante los órganos del partido, que podrán tomar medidas en función de los hechos y su gravedad o serán suspendidos de militancia.
En cualquier caso, se exigirá la dimisión del socialista ante la apertura de juicio oral, de manera que si no lo hace será expulsado del partido. Incorpora la garantía de que, si después resulta absuelto, el partido se compromete a adoptar las medidas necesarias para “restablecer el buen nombre y el honor de la persona absuelta”.