Begoña Carrasco García. Portavoz del Grupo Municipal Popular en el Ayuntamiento de Castellón. Presidenta del PP de Castelló de la Plana
Poco nos ha durado la ilusión a los castellonenses. Hace apenas tres semanas, que la alcaldesa de Castellón anunció a bombo y platillo que vecinos y foráneos podríamos volver a disfrutar de la Magdalena. Sí, volvían a celebrarse nuestras fiestas fundacionales, después de dos ediciones en blanco por la pandemia. Se celebrarían con las lógicas y necesarias medidas de seguridad, pero habría Magdalena.
Nuestro gozo en un pozo. Sí, pero no. Resulta que después de anunciarlo, el equipo de gobierno de Amparo Marco ha decidido dar marcha atrás, y 'Donde dijo digo, digo Diego'. Ni mesones, ni conciertos, ni espectáculos pirotécnicos nocturnos... tampoco habrá ampliación de horario para la hostelería. El resumen rápido es que a un mes de las fiestas, aún no se sabe lo que se va a hacer y lo que no. Ni los colectivos testeros ni los ciudadanos, sabemos a qué atenernos. Ni nosotros que somos concejales tenemos ni idea de cómo van a ser nuestras fiestas fundacionales. Esa es la lealtad del gobierno municipal a nuestra ciudad.
El Patronato de Fiestas, en manos del PSOE, no va a organizar programa de eventos, pero el Ayuntamiento sí va a autorizar a los particulares, es decir, a las collas y entes festeros, que puedan organizar y celebrar los suyos propios.
¿Qué invento es esto? ¿Acaso la pandemia no es igual para todos?
Eso es lo que trata de vendernos el gobierno municipal en el Ayuntamiento de Castellón. Y por si esto no es lo suficientemente contradictorio, aún es más difícil de entender cómo en Castellón, desde el Patronato de Fiestas no se va a organizar prácticamente nada, mientras que a muy pocos kilómetros de aquí, en Burriana o en Valencia, se están preparando las Fallas de la 'normalidad'. Con todo tipo de eventos, y con recintos que a día de hoy ya están tomando las calles y plazas.
Aquí hay gato encerrado. El gobierno de Castellón dijo que 'conciertos de Magdalena no', pero llama la atención cómo casi solapándose en el tiempo, Amparo Marco anunciaba y apoyaba el ciclo de conciertos que se van a celebrar en el puerto.
Por eso pedimos al equipo de gobierno coherencia y sentido común. Nos parece que, a estas alturas, ya no vale escudarse en la pandemia para tratar de justificar lo que es, a todas luces, una falta de previsión impresionante. Un año más, los socialistas no han hecho los deberes a tiempo y, a la vista de la falta de margen para organizar nada, cancelan todos los eventos, alegan medidas sanitarias, y todos tranquilos.
Después de tanto tiempo, los castellonenses merecen poder disfrutar de las fiestas de la Magdalena. Es posible celebrarlas de manera segura. Basta con imitar lo que ya están haciendo en otros municipios. Pero no, el equipo de gobierno de Amparo Marco está más preocupado en sacar adelante unos estatutos de fiestas que en la práctica son un golpe de estado a la independencia de nuestras fiestas, que volverán a estar sometidas a la voluntariedad de los gobiernos de turno. Este es el verdadero virus de la Magdalena: el intervencionismo de una izquierda que solo desea extender los tentáculos a todos los ámbitos de nuestra vida, incluida la fiesta, para hacer y deshacer a su voluntad.
Tenemos un gobierno municipal que se ha convertido en el peor virus de esta ciudad para los castellonenses. Hoy más que nunca, vamos a ser el antídoto para tanta falta de coherencia y tanta pérdida de oportunidades para los castellonenses.
