Marisol Linares. Exdiputada del PP.
España y sus ciudadanos llevamos un año desde que se inició el Estado de alarma viviendo una realidad insólita. Una situación que ya pesa en el ánimo de todos. Unos, por la falta de relaciones sociales y por la soledad que está haciendo mella en los sentimientos, y otros, porque la situación económica hace tambalear su bienestar y para las familias crece la incertidumbre sobre el futuro.
Ante esta situación catastrófica a nivel económicos y social se añaden los últimos acontecimientos políticos. La mecha que prendió Ciudadanos en Murcia ha hecho que, por unas horas y días, los protagonistas sean los políticos.
Lo que más se ha evidenciado estos días son las incongruencias, pues las hemerotecas han dejado al descubierto las incoherencias de los partidos. A través de las redes sociales se han recuperado declaraciones como las de Arrimadas renegando de las mociones de censura en tiempos de pandemia, o las del señor Sánchez sobre que no pactaría jamás con Bildu, por no comentar las soflamas de Iglesias con su famosa casta.
Todas estas incongruencias hacen que los ciudadanos tengan una gran desafección por la vida política, pero España y, concretamente los madrileños, por un día deben aparcar sus desencantos y salir a votar. Un voto más que nunca necesario, ya que la abstención como ha ocurrido en Cataluña, favorecería un Gobierno del mal llamado progreso social, que no tendría marcha atrás y que supondría un retroceso en la economía y en la marcha de una comunidad que es el motor de España.
España desde Madrid debe empezar a superar esta pandemia y la deriva a la que nos llevan los gobiernos de radicales de izquierda que hacen tambalear los derechos fundamentales de nuestra Constitución. Con leyes de Educación, despreciando el idioma español, con la expropiación de la propiedad privada, con subida de impuestos, unas políticas que se traducen en aumento del número de parados y el hundimiento de la economía. Por todo ello, es necesario que el día 4 de mayo, Madrid empiece la reconquista de una España fuerte y unida que tenga como estandarte la Monarquía y la Constitución que han hecho posible que alcancemos cotas de bienestar que en estos momentos están al borde de perderse.
Solo hay un partido, el PP, que con sus luces y sombras, ha demostrado a lo largo de décadas que ha sido capaz de sacar del bache al país cuando España se hundía por el paro y la economía, el mismo partido que ha sido coherente durante muchos años con una filosofía y principios basados en la concordia y en el humanismo cristiano. Un partido que está a la altura de lo que necesita España, votar el día 4 es necesario.
