La Asamblea, celebrada 48 horas después del preacuerdo de convenio, pide al Gobierno y a la UE apoyos que garanticen su competitividad
R. Pardo/Castellón Información
La asamblea general de Ascer celebrada hoy, apenas 48 horas después de alcanzado el preacuerdo de convenio colectivo y evitado en el último momento la huelga indefinida, sirvió para que el presidente Vicente Nomdedeu expusiera a los asambleístas los proyectos desarrollados y los retos a corto y medio plazo del sector cerámico, entre los que destaca el encarecimiento de los costes energéticos y el proceso de desacarbonización, que supondrá un cambio radical de paradigma.
Nomdedeu valoró el preacuerdo de convenio por un año, acuerdo que calificó como de transición y moderado, en el que ambas partes ganamos, y ambas partes cedemos en algunas de las pretensiones iniciales. De no haberse desactivado la huelga indefinida, esta hubiese tenido nefastas consecuencias, no solo en el normal desempeño de la actividad sino también en el clima laboral de las empresas, y en la imagen de todo un sector”.
Tras esta reflexión al hilo de la actualidad del sector, que emplea a más de 15.000 trabajadores, Nomdedeu puso sobre la mesa los principales retos de las empresas, entre los que figura el de la sostenibilidad y equilibrio medioambiental que pasa, entre otras metas, por la descarbonización con los “exigentes objetivos que fija Bruselas, que establecen un ritmo irreal e inalcanzable para nuestro sector, ya que hoy no existen alternativas energéticas que permitan sustituir al gas natural en el proceso productivo”.
En ese contexto, expuso el presidente de Ascer, “las alternativas que existen todavía no son una opción: biometano, electrificación, hidrógeno verde, captura de CO₂. No son una opción tecnológicamente y tampoco lo son económicamente, con precios de suministro que nos conducirían irremediablemente a la quiebra y al cierre de la actividad industrial en Europa”.
El impacto de la factura eléctrica en la economía de las empresas también centró parte de la intervención de Nomdedeu al aludir “al auge imparable de costes con un gran peso en nuestras facturas, como el precio del gas, de la electricidad, del CO₂ reduce cada día los márgenes en nuestros productos, y lo que es más preocupante, se reduce nuestra capacidad para innovar e invertir en proyectos de futuro como los necesarios para acometer el proceso de descarbonización”.
El presidente de Ascer ha reivindicado una vez más la importancia de contar con una industria sólida y asentada para lograr alcanzar la recuperación económica de España y de la UE. “Los reguladores en España y en Bruselas, han de ser conscientes y responsables a la hora de establecer políticas que resultan tan gravosas para la industria. Así difícilmente lograremos reindustrializar España”.
Otra palanca de crecimiento y recuperación será el impulso a la rehabilitación y a la reforma que recoge el Plan de Recuperación Verde de la Unión Europea, y en España el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia. “Las recomendaciones establecidas por la Comisión Europea van en la línea de mejorar la accesibilidad, aumentar la eficiencia energética, y mejorar la salubridad y el estado de conservación de los edificios y de los entornos urbanos. Ámbitos todos ellos donde la cerámica, con sus magníficas prestaciones técnicas y su versatilidad en el uso, contribuirá sin duda a lograr esa renovación y mejora. Por lo tanto, está en nuestras manos trasladar y posicionar nuestros productos en el “top of mind” del consumidor y del prescriptor de materiales para que seamos la primera opción a la hora de acometer esas mejoras”.
Nomdedeu reconoció también el compromiso y la labor desempeñada por la Junta Rectora “que trabaja por el bien de la colectividad” así como agradecer al equipo técnico de ASCER su profesionalidad e implicación. Durante la Asamblea, se ha tenido un emotivo recuerdo dedicado a la figura de Jorge Bauset, Vocal de la Junta Rectora, y se han dedicado unas palabras a las víctimas de la pandemia.
