El secretario general de la ejecutiva provincial califica las actuaciones de "contrarias a los principios democráticos y pluralismo político"
Castellón Información
El pleno de la ejecutiva del PSPV-PSOE de Castelló ha aprobado por unanimidad una moción para que los ayuntamientos de la provincia condenen los últimos ataques violentos a las Casas del Pueblo y la sede federal de la calle Ferraz, perpetrados por grupos extremistas.
El secretario general de los socialistas, Ernest Blanch, ha instado a condenar este tipo de actuaciones "contrarias a los principios democráticos y al pluralismo político como uno de los valores constitucionales de nuestra norma fundamental".
Blanch ha recordado que las sedes del partido socialista en la provincia de Castelló también han sido objeto de ataques fascistas en varias ocasiones. El último fue la madrugada del 14 de octubre cuando las sedes de Castelló, Borriana, Nules y Almassora fueron pintadas con la frase "El Valle no se toca", ante la inminente exhumación de Francisco Franco.
"Los ataques que estamos sufriendo son consecuencia del discurso del odio promovido por la extrema derecha pero no conseguirán amedrentarnos y no dejaremos de defender lo que es justo. La violencia i la intolerancia no tiene cabida en nuestra democracia y la razón está de nuestra parte", ha manifestado Blanch.
En la moción se expresa la más enérgica repulsa hacia los ataques perpetrados a varias sedes por parte de grupos de extrema derecha y condena "el intento de impedir la libre expresión de los valores socialistas que, cada día, realizan miles de personas en sedes, grupos municipales o cualquier otro foro público, donde trabajamos con el único objetivo de mejorar la vida y el bienestar de nuestro vecinos".
A través de esta propuesta, también se quiere trasladar la "profunda preocupación" del partido socialista por la actuación de "grupos intolerantes contra nuestras agrupaciones" así como "contras las sedes de otras formaciones políticas que también se han visto afectadas por ataques de grupos extremistas".
Ante esta situación, "los demócratas tenemos que mostrar unidad ante cualquier tipo de violencia e intento de intimidación. El pluralismo político se fundamenta en el reconocimiento a la expresión libre de las preferencias ideológicas, por parte de la ciudadanía española, porque quienes compartimos los valores constitucionales, somos conscientes de que la discrepancia política no es más que un debate democrático sobre cómo cada opción entiende que se tienen que plantear respuestas políticas a los problemas y desafíos que tiene nuestra sociedad", concluye la moción.
