La causa de este nuevo descenso productivo es la anomalía climática durante la pasada primavera, que provocó problemas en las fases de floración y cuajado de los frutos
La Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA) estima, basándose en consultas a productores de todas las comarcas citrícolas, que la producción de mandarinas y naranjas en la campaña 2022/2023 registrará un descenso aproximado del 10% en la Comunitat Valenciana respecto a la temporada anterior, la cual ya fue inferior a la media de la última década.
La principal causa de este nuevo descenso productivo es la anomalía climática, especialmente la acumulación de lluvias persistentes, olas de frío y oscilaciones bruscas de temperaturas durante la pasada primavera, que provocaron problemas en las fases de floración y cuajado de los frutos.
Las estimaciones de AVA-ASAJA apuntan a una disminución similar tanto en naranjas como en mandarinas, así como en prácticamente todas las variedades con implantación en la citricultura autonómica. En total, la cosecha prevista se situará en casi tres millones de toneladas.
El presidente de AVA-ASAJA, Cristóbal Aguado, señala que "estamos ante una producción suficiente para abastecer los mercados internacionales pero que obliga a elevar los precios para garantizar la rentabilidad de los productores. Después del desastre de la última campaña, sobre todo en la naranja, obtener un precio justo es más necesario que nunca. Porque si se repite un año como este podría acelerarse el abandono de tierras, con las pérdidas económicas, sociales y medioambientales que ello supondría. Un manto verde que no se quema es la mejor garantía para luchar contra el cambio climático tanto en España como en el centro de Europa, donde ya se empiezan a sufrir las consecuencias de tantos campos dejados de cultivar".
AVA-ASAJA insta tanto a las administraciones como al conjunto del sector a trabajar con seriedad, profesionalidad y transparencia para obtener unos precios en origen que permitan compensar la caída de producción comercializada y el aumento de los costes de producción. Efectivamente, la organización agraria estima, a partir de datos del Instituto Valenciano de Investigaciones Agrarias (IVIA) y del Ministerio de Agricultura, que los costes de producción de los cítricos se han incrementado al menos un 40% en las dos últimas campañas, debido al encarecimiento de los principales inputs del cultivo: energía eléctrica, combustibles, fertilizantes, fitosanitarios, etc. Los costes medios de producción rondan los 0,32 euros/kg en naranjas (variedad Navelina) y los 0,39 euros/kg en mandarinas (variedades precoces de clementinas), de manera que vender por debajo de esas cantidades supone perder dinero en muchos casos, más si cabe en un contexto de disminución de cosecha comercializada.