La alcaldesa, Amparo Marco, y el vicealcalde, Enric Nomdedeu realizaron un balance de su primer año de Gobierno
Transcurrido un año, desde que tomó posesión el Gobierno ‘del cambio’ PSOE-Compromís, se han rendido cuentas en rueda de prensa y, como no podía ser de otra manera, se ha valorado muy positivamente el efecto de la nueva gestión municipal. Avances que se centran en la transparencia, la fiscalidad, e incluso, en que la atención al ciudadano sea un derecho y no se convierta en un favor. La alcaldesa ha reconocido también, que ha habido errores que dice asumir, pero se marca como meta el 2019 para cumplir al cien por cien el pacto del Grao y sus compromisos.
Esperanza Molina/Castellón Información
El equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Castellón, está contento. Tras un año de gobierno ‘del cambio’, esta mañana comparecían la alcaldesa de Castellón, Amparo Marco, y el vicealcalde de la ciudad, para ‘rendir’ cuentas de lo que ha supuesto la gestión municipal en los últimos 12 meses.
Y por supuesto, el resultado no podía ser más positivo. Según han manifestado los dos máximos responsables del equipo de Gobierno de Castellón: “El gobierno progresista del Ayuntamiento de Castellón ha llevado a cabo más de 250 acciones de gobierno en su primer año al frente del consistorio de la capital de la Plana.
El vicealcalde, Enric Nomdedéu, ha recordado, que durante 24 años el Ayuntamiento ha estado gobernado por el Partido Popular con mayoría absoluta. "Esto ha implicado un sistema de trabajo, y una organización funcionarial al servicio de esa manera de trabajar, poco transparente, poco eficiente y no siempre suficientemente respetuoso con los procedimientos administrativos pautados, a nuestro entender".
Sin querer entrar a hacer críticas, Nomdedeu ha hecho una reflexión: La mayor parte de los funcionarios del Consistorio, llevan menos de 24 años de trabajo ‘en la casa’, por tanto, solo conocen una forma de hacer las cosas, que ha derivado, a su entender, en protocolos, a veces absurdos, que enfrentaban a departamentos y que multiplicaban por tres la misma gestión administrativa de temas como las ayudas sociales.
Por este motivo, añadió Nomdedeu, una de las prioridades del nuevo gobierno ha sido, facilitar las cosas, hacer más eficaz la gestión, para que los ciudadanos puedan defender sus gestiones, porque tienen derecho a ello, y no porque se les haga el favor.
"Por eso, declaraba Nomdedeu, durante este primer año, el Gobierno Local ha hecho un trabajo menos visual, pero muy importante, que ha consistido al hacer un diagnóstico de que le pasaba en esta casa y de cómo trabajaba esta casa, y si se acoplaba o no en la manera que este gobierno quiere hacer las cosas. Y obviamente la respuesta es no" y para corregir esta situación "hemos planteando diferentes soluciones de futuro como invertir 1,7 millones para modernizar la estructura organizativa de la casa o rediseñar una relación de puestos de trabajo porque esta estructura heredada de un cúmulo de ocurrencias funciono, se modernizo tecnológicamente y sea un paradigma de la transparencia y de la legalidad".
El vicealcalde ha apuntado también: “Queremos que se hagan las cosas ajustadas a la legalidad, con eficiencia, eficacia y transparencia. Por eso hemos trabajado y hemos invertido, en el servicio de un programa transparente, democrático y pensado para las personas".
Posteriormente ha tomado la palabra la alcaldesa de Castellón, Amparo Marco; y su primera manifestación ha sido: “objetivo cumplido”.
Marco ha destacado en este sentido, que una vez discurrido un año desde la firma del Pacto del Grau, que suscribieron PSPV, Compromís y Castelló en Moviment, se ha cumplido, al menos, el 40% de los puntos pactados que podían resolverse durante el primer año.
Marco ha señalado que sus prioridades de gobierno se han basado en: "invertir en las personas, más presupuesto para bienestar social y con más oportunidades para los que tienen menos; apostar por la ocupación y la promoción económica a través del turismo, el comercio o la innovación; implantar la transparencia de forma transversal en todas las áreas de gestión; potenciar la participación ciudadana con unos presupuestos participativos y nuevas vías de participación vecinal en el pleno; dar impulso al nuevo modelo de ciudad con los trabajos de redacción del Plan General de una forma consensuada con la ciudadanía; mejorar los servicios públicos para conseguir una ciudad más habitable; reequilibrar el territorio haciendo llegar las inversiones y las mejoras de los servicios a los grupos periféricos y convertir Castellón en una ciudad viva, activa, que disfruta del ocio y la cultura".
Dicho esto, se ha centrado en la gestión económica del Ayuntamiento, que se ha manifestado en poder obtener el superávit más grande de la historia, con 22,6 millones de euros; Esto ha servido para reducir la deuda en 45 millones de euros en dieciocho meses, de forma que el consistorio finalizará 2016 con una deuda de 70 millones y un ratio de endeudamiento del 50% frente a los 115 millones y el 80% que dejó el PP y tener un colchón financiero de 5,3 millones que nos permite pagar con celeridad y pedir menos dinero a los bancos”.
Además, la primera edil ha destacado que el Gobierno local realizará en un año y medio la mayor inversión en obras públicas y servicios que nunca se ha hecho en la ciudad de Castellón: 19 millones de euros que se distribuyen entre los 3,4 millones de inversiones sostenibles del 2015; los 7,1 millones en inversiones del presupuesto del 2016 y los 8,6 en inversiones sostenibles del 2016.
Marco ha reconocido también, que se han producido errores, pero debidos, fundamentalmente a las ganas de hacer las cosas: "A veces nos equivocamos. Está bien reconocer que uno comete errores". Y en este tema se ha referido a 'las prisas' del equipo de gobierno para reducir la presión fiscal, que no fue respaldada por Castelló en moviment, y, por tanto, no salió adelante; o al tema de los desahucios. "Todo eran buenas intenciones. Los bancos, en Castellón, mostraban buena voluntad, pero luego se produjeron muchas dificultades administrativas", indicó Marco: "Pero hay que señalar, que ninguna familia se ha quedado en la calle por el desahucio de su primera vivienda".
