Los libreros redudan en la necesidad de atraer a los ciudadanos a la zona centro de Castellón para así aumentar el número de ventas.
La 31 Feria del Libro Antiguo y de Ocasión de Castellón ha cerrado este domingo con un balance "flojo" para los libreros. Según apuntan desde el sector, las ventas han sido "aún más bajas que otros años".
Ismael Bonet, desde la caseta de la librería Argot se aventura incluso a hablar de cifras y comenta que "puede qe se haya vendido hasta un 25% menos que en otras ocasiones". Y es que, parece ser que en estos quince días, la inestabilidad del tiempo, con las lluvias de las últimas jornadas y en especial en fin de semana pero sobre todo "la poca afluencia de público al centro de la ciudad", como coinciden todos los vendedores, han jugado en contra para que el sector del libro Antiguo y de Ocasión pudiera dar un balance positivo en este encuentro.
De hecho, incluso desde los puestos que vienen de Valencia a esta cita anual de la plaza Santa Clara, afirman con pesimismo que desde hace ya cinco años "no compensa venir a Castellón". Y desde luego, en lo que más redundan todos los profesionales consultados por este diario digital es en la necesidad de "atraer de nuevo a la gente al centro, como sea".