Los concejales de Cultura y Personal fueron a pedir que los problemas no trascendieran a la prensa para ‘no dañar’ la imagen de la entidad
Los concejales de Personal y Cultura del Ayuntamiento de Castellón, conocían y tenían documentación de las denuncias y solicitudes de apoyo de los músicos por el acoso que estaban sufriendo. Así acabaron por reconocer Verónica Ruiz y Antonio Lorenzo en una reunión mantenida con los integrantes de la Banda de Música el miércoles, cuando fueron a pedir que los problemas internos no trasciendan a la opinión pública ni a la prensa, para no dañar la imagen de la Banda de música de Castellón
Esperanza Molina /Castellón Información
La concejal de Cultura, Verónica Ruiz, y el concejal de Personal, Toni Lorenzo, se reunieron el pasado miércoles con los músicos de la Banda Municipal.
Esta reunión se realizaba después de más de año y medio de conflictos internos dentro de la agrupación municipal, de la apertura de una comisión de investigación, de que el tema se haya filtrado a los medios de comunicación, y a pocos días de que la concejal, Verónica Ruiz, comparezca en el pleno de esta tarde para dar explicaciones del tema, en el pleno del Ayuntamiento.
La reunión podría tener varias lecturas, pero ponen blanco sobre negro unja serie de contradicciones por parte de los representantes municipales, que primero dijeron no conocer nada; luego, reconocieron haber sido informados de algo; y posteriormente, tuvieron que admitir que disponían de más información de la que han dicho tener.
El objetivo de la visita, según se desprende de las alocuciones de Toni Lorenzo y Verónica Ruiz al principio de su intervención, es el de ‘poner paz’ y acabar de una vez por todas con los conflictos generados en un colectivo, como es la Banda de Castellón, que pertenece a la ciudad.
Dicho esto, se mostraron abiertos al diálogo y a escuchar a los músicos… el fuego tardó en romperse… Pero cuando comenzó, la marea se convirtió en tsunami que no dejó indiferente a nadie.
Salieron a relucir los conflictos de Banda tras la anulación de las bases, las presiones realizadas por algunos miembros de la misma contra los otros, recogidas en un escrito, que primero no habían afirmado conocer y luego se sabían de memoria…
E incluso, otras medidas de presión, como los comentarios vertidos en una página de Facebock, y por ir todavía más lejos, los ataques directos e indiscriminados a algunos miembros de la Banda, como es su director, al que llegaron a defenestrar en redes sociales ‘algunas personas’, sin que el Ayuntamiento tomara medidas para pararlo… o incluso, cartas anónimas con fotografías remitidas al domicilio del directos de la Banda, por no hablar de otro tipo de acosos, de los que también se dio información a los dos representantes municipales en su momento. De esta forma, la afirmación de Verónica Ruiz de “yo no sabía nada”, “el director no me comentó nada”, también quedó en papel mojado, cuando al final tuvo que admitir, que si, que le habían pasado fotografías, comentarios, y una descripción de lo que sucedía en el seno de la banda municipal.
Con esto, los representantes municipales fueron modificando su postura de “no conocíamos nada”, “podíais haber hablado con nosotros”, a recriminar que las quejas hubieran salido en los medios de comunicación, y a la mala imagen que los mismos músicos han generado de su propia Banda de Música.
Algunos preguntaron entonces ¿Si lo sabían, por qué no actuaron? Y es que, según la información de que dispone Castellón Información, durante meses ha habido comunicaciones cruzadas, entre ellos, de los sindicatos a los representantes municipales, pidiendo soluciones para un conflicto que, al final, como comentaron algunos músicos, ha estallado porque desde el Ayuntamiento no se les hizo caso hasta entonces.
Salieron a relucir los acosos, la famosa carta de denuncia de los músicos. Aún entonces, Verónica Ruiz intentó desviar el tema por motivos laborales. “Yo no conozco a nadie”, mi despacho ha estado siempre abierto”. Pero los músicos también le indicaron con claridad, que lo habían intentado, una y otra vez, a través de su representante más directo, el director de la Banda, quien, le había comunicado la situación, le había enseñado documentos y fotografías...
Y para rizar el rizo hubo también quien pidió que se buscaran a los autores de las filtraciones y se actuara en contra de ellos.
La situación se les fue de las manos tanto a Toni Lorenzo como a Verónica Ruiz.
Lorenzo pidió calma. Esta es la tercera mejor banda de España, y su gran valor son sus músicos.
El mismo director de la Banda fue el que se dirigió a todos para pedir un punto cero en todos estos conflictos, para poder comenzar de nuevo desde un ambiente de cordialidad para demostrar que “somos los mejores porque lo somos”. Un pacto o un reto que el concejal de Personal recogió al instante. “Hay que acabar con estos conflictos que no solo dañan la imagen del Ayuntamiento, sino de la Banda de la Ciudad.
Y no fue fácil, porque a tenor de lo indicado, también se les pidió a los músicos que colaboraran para poder dilucidar algunos temas pendientes como los complementos específicos de la Banda, que en teoría ya deberían estar aprobados, o la creación de las plazas para los músicos que llevan más de 15 años como interinos.
¿No será esto una amenaza? Interpeló entonces alguno. Toni Lorenzo huyó de este apelativo. No había amenazas sobre la mesa, explicó, pero sin duda, será más fácil trabajar porque la Banda y los músicos obtengan el reconocimiento y los derechos que les pertenecen, si reina un buen ambiente dentro de la agrupación musical.