Barrachina destaca la puesta en marcha de la nueva Ley de Autónomos y el incremento salarial que alcanzará el 7,5% de los empleados públicos y otros sectores
Castellón Información
El presidente del Partido Popular en Castellón, Miguel Barrachina, ha destacado hoy que el PP “no sólo se ha convertido en el partido del empleo empleo, sino que también es el partido del empleo estable”.
El presidente del PP ha explicado que en sólo un año “más de 9.000 castellonenses se han afiliado a la Seguridad Social” y ha advertido que “desde que se pusieron en marcha las reformas del Partido Popular, 30.000 personas se han afiliado a la Seguridad Social y hay 40.000 castellonenses menos paro”. Unas reformas que “el PP hizo en solitario y que están demostrando su buen funcionamiento, aunque aún queda mucho por hacer”.
A este paquete de reformas se le suma, por ejemplo, la puesta en marcha de la nueva Ley de Autónomos que ha contado con el apoyo de casi todos los grupos parlamentarios y que supone un antes y un después en la consecución de derechos de estos trabajadores. De hecho, los propios empresarios autónomos han anunciado que estas medidas, que cuentan con elementos como ampliar la tarifa plana de 50 euros, aumentar los gastos deducibles, o beneficios a la maternidad, van a disparar la creación de empleo.
A ello se le suma el incremento salarial que alcanzará el 7,5% de los empleados públicos, así como el incremento salarial de un gran número de trabajadores impulsados en distintos convenios de infinidad de sectores empresariales.
Barrachina ha destacado que “después de la destrucción, la sangría y la bajada de sueldos de la época del PSOE, el PP ha conseguido en solitario darle la vuelta al marcador y 2018 será otro ejemplo de creación de oportunidades”. Tal y como ha advertido, “mientras el PP trae trenes como el hecho de triplicar las frecuencias en el Maestrat y crea empleo, el PSOE trajo la ruina del Castor a esta provincia” ya que fue la única inversión para Castellón durante los años de mandato socialista, junto a las desaladoras que nadie quiere y una cárcel.
