Superará el nivel precrisis de PIB en casi 6 puntos porcentuales, y el de PIB per cápita en 4 puntos porcentuales, respectivamente
Castellón Información
BBVA Research estima que el crecimiento de la economía valenciana podría situarse en el 1,5% en 2020 y acelerarse hasta el 2,0% a finales de 2021. Con ello, al final del periodo superará el nivel precrisis de PIB en casi 6 puntos porcentuales, y el de PIB per cápita en 4 puntos porcentuales, respectivamente. De cumplirse estas previsiones, la región completaría nueve años de recuperación. Asimismo, en el conjunto de 2020 y 2021 podrían crearse unos 55.000 empleos, lo que llevaría a una reducción de la tasa de paro promedio hasta el 12,8% en 2021.
Según el último informe ‘Situación Comunitat Valenciana’, presentado hoy por Rafael Doménech, responsable de Análisis Macroeconómico de BBVA Research, y David Conde, director de la Territorial Este de BBVA, entre finales de 2018 y principios de 2019, la economía valenciana habría mantenido un crecimiento alrededor de 0,5%-0,6% trimestral, ligeramente por encima de la media nacional, para desacelerarse hasta el 0,3% trimestral a partir del segundo trimestre del año pasado, un crecimiento ligeramente inferior al del conjunto de España. Con ello, el crecimiento de la economía regional se habría estabilizado en 2019 en el 1,9% anual, una décima por debajo de la media nacional y en línea con el crecimiento del año anterior.
BBVA Research señala varios factores que explican esta evolución de la economía valenciana, marcada por una nueva desaceleración de la demanda interna. Por un lado, en el primer semestre de 2019 se observó un menor dinamismo del gasto de los hogares valencianos, en particular de bienes duraderos. No obstante, se habría recuperado en la segunda mitad del año, hasta situar a la Comunitat a la cabeza del crecimiento del consumo privado, tan solo detrás de Madrid. Por otro, el deterioro reciente de los indicadores del sector de la construcción, afectados en parte por el incremento de la incertidumbre debido, entre otros factores, a los cambios regulatorios.
Sin embargo, el moderado impulso fiscal, el buen comportamiento de las exportaciones, y de la inversión privada, favorecida por el fuerte dinamismo de las importaciones de bienes de equipo y de los visados no residenciales, habría favorecido la estabilidad del crecimiento regional.
Por su parte, el sector turístico alcanzó nuevos récords en viajeros, pernoctaciones y gasto, apoyados principalmente por el turismo nacional. Por zonas turísticas, la Costa de Castellón experimentó el mayor dinamismo mientras que la Costa Blanca registró incrementos más moderados.
El mercado laboral valenciano se desaceleró en 2019, debido al menor crecimiento de la segunda parte del año, aunque mostró mayor dinamismo que el conjunto de España. Así, la afiliación a la Seguridad Social en la comunidad creció un 3,1% en 2019, por encima de España, lo que contribuyó a su posicionamiento como la tercera región más dinámica, tras Madrid y Murcia. No obstante, esta mejora es heterogénea y se estaría concentrando en las áreas urbanas y las capitales de provincia. Destaca el fuerte incremento de las ciudades de Valencia y Alicante, que presentaron el mayor dinamismo en 2019.
La economía valenciana podría acelerarse en 2021
Como consecuencia de los factores anteriores, BBVA Research prevé que la ralentización de la actividad en la Comunitat continúe también en 2020, y que el PIB regional aumente un 1,5%, para acelerarse ligeramente hasta el 2,0% en 2021, si no se materializan algunos de los riesgos existentes. Entre los factores que contribuirán a la recuperación del crecimiento el próximo año destacan la resiliencia del consumo interno, las señales de fortaleza de la inversión en equipo y de los visados no residenciales, así como una leve mejora del entorno internacional.
El crecimiento del gasto de las familias valencianas seguirá mostrando un crecimiento moderado durante este año, en un contexto en el que tanto la demanda embalsada durante la crisis como las políticas expansivas de años anteriores dejan de actuar como soporte del crecimiento. No obstante, el buen ritmo de crecimiento de la renta, el repunte de la riqueza financiera, el dinamismo de la financiación al consumo, así como la menor incertidumbre que en años anteriores podrían impulsar el consumo de los hogares a lo largo del horizonte de previsión.
En cualquier caso, a futuro resultan de particular importancia los cambios que el nuevo Gobierno de España pueda introducir en ámbitos como el mercado laboral o las pensiones.
La inversión en maquinaria y equipo podría acelerarse en la región, aprovechando los bajos costes de financiación, la reducción de algunas incertidumbres y la recuperación de la demanda europea. Así lo apuntan la evolución de las importaciones de bienes de equipo, que con el incremento alcanzado en 2019, acumularía siete años de crecimiento consecutivo o el repunte de los visados no residenciales.
55.000 nuevos empleos en la Comunitat Valenciana en 2020 y 2021
De cumplirse el escenario previsto, el Servicio de Estudios de BBVA prevé la creación de unos 55.000 puestos de trabajo en 2020 y 2021. Con ello, la tasa de paro promedio se reduciría hasta el 12,8% en 2021, apenas 0,8 puntos porcentuales por encima de su nivel en 2008, pero aún lejos del mínimo precrisis en 2007, cuando se situó cerca del 8%.
Los primeros datos de 2020 apuntan a una ligera mejora del mercado laboral valenciano. El crecimiento en el primer trimestre del año, se situaría en el 0,5 trimestral, por encima de la media de España.
Sin embargo, la región debería impulsar la formación e inserción laboral de aquellos colectivos con más dificultades, jóvenes que ni estudian ni trabajan y parados de larga duración entre otros.
Moderada reducción de las incertidumbres
Aunque los riesgos del escenario son a la baja, la velocidad futura de la recuperación dependerá de la resolución de los distintos focos de incertidumbre y de las políticas que se implementen.
En el escenario global, la incertidumbre se reduce por la salida del Reino Unido de la Unión Europea sin desequilibrios en los mercados, lo que favorece a la Comunitat por su mayor exposición al mercado británico en exportaciones de bienes, gastos turístico y mercado inmobiliario. Además, la posible reducción de las tensiones comerciales entre EEUU. y China facilitará la recuperación de los flujos comerciales globales, aunque los artículos afectados representan una parte reducida de las exportaciones valencianas. Sin embargo, el brote de virus COVID-19 afecta a la economía mundial justo cuando las perspectivas de crecimiento estaban mejorando, lo que supone un riesgo a la baja adicional sobre el escenario planteado por BBVA Research.
A nivel doméstico, aun con la formación de gobierno en España, la incertidumbre de la política económica se mantiene elevada por la falta de consenso en temas clave como el mercado laboral o las pensiones. A esto se añaden los cambios regulatorios que están afectando negativamente al sector automotriz y al inmobiliario.
Con todo, según BBVA Research, la economía valenciana y la española se encuentran mejor preparadas para afrontar un escenario de incertidumbre, ya que muchos de los desequilibrios que retroalimentaron los efectos de la última crisis se han reducido. Sin embargo, en ausencia de reformas eficientes, el crecimiento potencial de la economía estaría convergiendo a niveles menores que los observados al inicio de la recuperación.
Recibidos por el President, Ximo Puig
Ximo Puig, president de la Generalita, ha recibido en audiencia a una delegación de representantes del BBVA con motivo de la presentación del informe 'Situación económica de la Comunitat Valenciana en el primer semestre de 2020'. Al encuentro con el president, en el que ha estado acompañado por el conseller de Hacienda y Modelo Económico, Vicent Soler, han asistido el director territorial Banca Minorista DT Este del BBVA, Alberto Charro; el director Regional Banca Empresas y Corporaciones DT Este, Carlos Rodríguez; el director de Instituciones Regional Este, Sergio Alcaraz, y el responsable de Análisis Macroeconómico de BBVA Research, Rafael Domenech.