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La concejal de movilidad urbana de Benicàssim, Arturo Martí ha repasado esta mañana el estado de ejecución de los proyectos que el Ayuntamiento ha iniciado para este final de año con el objetivo de “ganar seguridad en nuestras calles y favorecer la buena circulación de los vehículos, salvaguardando las zonas más peligrosas con nuevas medidas de señalización que adviertan de la necesidad de extremar las precauciones”.
Los trabajos se han incluido en pequeños proyectos de ejecución que están en estos momentos en marcha, incluso algunos de ellos ya acabados y que contemplan el repintado de las señales horizontales en aquellos lugares que se encontraban en mal estado, así como la reposición de señalética vertical en otras calles. Pero también se han incorporado nuevas zonas de actuación donde, se ha atendido a las demandas de los vecinos para actuar colocando la señalización más adecuada para facilitar la movilidad.
Arturo Martí ha repasado las zonas que se ha acometido, como son el pintado de dos nuevos pasos peatonales en el aparcamiento del futuro boulevard con sus correspondientes señales verticales de identificación para los conductores. La ubicación de una zona de prohibición de aparcamiento en la esquina de la calle Oceanía con la calle Joaquín Ibáñez García, ya que se aparcaba en la zona de entrada de la calle y así se favorecerá la visibilidad de los tránsitos.
El concejal de movilidad ha manifestado que “prácticamente la totalidad de las actuaciones se han planificado tras reunirnos con los vecinos del entorno y ver sus demandas, porque ellos son los que cada día tienen las necesidades de movilidad y se ven afectados por las posibles carencias o necesidades. Así les mejoramos la calidad de vida en el entorno de sus domicilio”.
Otras de las mejoras viales que se han cometido es el repintado total de la isleta central de la plaza de la Estación. Y el pintado de nuevas señales direccionales viales en la calle Sant Antoni, para dirimir el tráfico que se dirige hacia playas o hacia centro ciudad.
También se han realizado pequeñas mejoras como la eliminación de un cartel de grandes dimensiones en la avenida Frares que estaba muy deteriorado y ya no cumplía con sus funciones informativas. Y la colocación de una señal de calle sin salida, en la calle Sant Roc.
Pero además, se han cambiado los bolardos de la calle Dolores, ampliándolos en número para mejorar el acotamiento de la zona peatonal y la zona de paso.
'Orejeras verdes'
Dentro de este macro proyecto de mejora de la movilidad se encuentra una actuación que ha llamado la atención a los vecinos. Se trata de unas pequeñas ampliaciones de las curvaturas de las aceras, en la zonas de cruce de las calles transversales a la Gran Avenida Jaume I. Estas 'orejeras', que se han pintado de verde llamativo para destacar sobre el resto del asfalto, pertenecen, como ha informado el concejal, a un estudio pormenorizado de la zona para ganar visibilidad en la entrada y salida de los cruces de las calles que, especialmente son más estrechas y carecen de aceras peatonales, por lo que su acceso a las avenidas les resultaba más peligrosa.
La actuación se ha acometido tanto en la Gran Avenida como en la avenida Ferrandis Salvador y permiten, como ya se está comprobando, tener una acceso rodado más seguro a las grandes vías longitudinales de la localidad.
Arturo Martí ha señalado que “además, cada calle ha tenido que ser diseñada expresamente para su radio de giro del tráfico, lo que hace que cada una de estas orejeras se adapte perfectamente a la zona de rodadura del tráfico según el ángulo de incorporación al vial”.
