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Una nueva edición del Taller de Empleo de Vila-real ha puesto el punto y final a nueve intensos meses de formación y prácticas con la entrega de diplomas a los 12 alumnos que se han formado en la rama de eventos y a los 12 de la vertiente sociosanitaria. El alcalde, José Benlloch, y la concejala de Economía, María Dolores Parra, acompañados por el director general de Planificación y Servicios del Servef, Juan Ángel Poyatos; la jefa de Servicio Territorial de Formación para el Empleo, Rosario Tena; así como por técnicos del departamento de Fomento Económico, la directora del taller y el profesorado, han hecho entrega de los títulos a los participantes.
“Estamos muy satisfechos por el alto nivel formativo adquirido por los alumnos de esta edición y por las nuevas oportunidades de inserción laboral que encontrarán gracias a esta iniciativa”, explica Benlloch, quien recuerda que ambos talleres suponen “vetas potenciales de mercado laboral”, como son la asistencia a dependientes y la organización de eventos, algo que “casa con dos de las apuestas de futuro de la ciudad, como son las marcas de Ciudad del Deporte y la Salud y Ciudad de Festivales, Congresos y Eventos y que forma parte de nuestro compromiso a la hora de ofrecer una formación diferenciadora que no sature a la provincia con demasiadas personas con la misma especialidad”.
Por su parte, Parra, que destaca que el 18% de alumnos de la anterior edición encontraron empleo, ha anunciado que ya se trabaja en una próxima edición, que contará con importantes novedades. “Si los participantes han tenido ahora nueve meses de formación y prácticas remuneradas –dos más que en la anterior-, la siguiente tendrá una duración de 12 meses”, explica. Asimismo, los inscritos, en lugar de recibir un certificado de profesionalidad, podrán recibir dos tipos, ya que “se establirà el grado 1 y el 2, ofreciendo la oportunidad de formarse y progresar a personas que no tienen ningún tipo de estudio, que mediante los exámenes oficiales podrán estudiar y también recibir un sueldo”.
Por otro lado, desde la Concejalía de Economía ya se tiene perfilada la próxima convocatoria, a falta de saber qué itinerarios concede la Generalitat. “Hemos solicitado cinco modalidades para los nuevos talleres de empleo, para obtener un perfil más variado de trabajadores, pero siempre centrado en la atención a las personas”, afirma Parra.
Entre los itinerarios, se encuentran las actividades auxiliares en agricultura, como las centradas en la instalación y mantenimiento de jardines y zonas verdes, también otra vertiente relacionada con la limpieza de superficies y mobiliario en edificios y locales, una rama de atención sociosanitaria a personas en domicilio, otra de operaciones básicas de cocina y una más relacionada con las tareas básicas de servicio de restaurante y bar.
La actual edición, que ha tenido un coste de 367.607 euros, de los que 329.667,84 están subvencionados por la Generalitat, se ha dirigido a desempleados mayores de 25 años con especiales dificultades de inserción laboral, que han realizado sus prácticas –en el caso del módulo sociosanitario- en la residencia para mayores Virgen de Gracia; en el centro de día de discapacitados psíquicos, así como en el centro de día Molí la Vila para enfermos de alzhéimer y en el Campus Natura para niños con necesidades educativas especiales. Por su parte, el otro módulo ha intervenido en actos como los congresos de alumnos mediadores, en el Congreso Iberoamericano de Mediación Policial, en las visitas al museo Casa de Polo o en la organización de la Fira del Llibre y en la oficina de Turismo, entre otros.
