Rafa Mezquita/Castellón Información
El riesgo urbanístico de los últimos años es uno de los principales problemas a los que ha tenido que hacer frente el consistorio de Vila-real en los últimos años. Para ello, el alcalde de Vila-real, José Benlloch, ha dado a conocer un nuevo plan de regeneración urbana, acompañado por el edil de urbanismo, Emilio Obiol, en el que Vila-real mantendrá "su modelo de ciudad mediana" ante "la insistencia" del Gobierno anterior del PP en situarla como "una nueva Manhattan" con edificios de "más de veinte alturas". El alcalde también ha incidido en "los pelotazos", que han llevado a pagar al consistorio 16 millones de euros en sentencias de expropiación urbanística.
Para debatir sobre este aspecto, el alcalde y el encargado del área, han presentado unas jornadas, que se celebrarán en el edificio de la Caja Rural, y que tendrán como protagonista las Técnicas Operativas en la Gestión del Suelo, así como sus aprovechamiento urbanísticos i su respectivo planteamiento.
Ley de Ordenación del Territorio
Por ello, la solución en la que se trabaja pasa por “aprovechar zonas urbanas donde hasta el momento había industrias que se han marchado para ofrecerlas a los afectados, algo posible gracias a la Ley de Ordenación del Territorio, Urbanismo y Paisaje”.
Una medida que tanto Benlloch como Obiol consideran más justa para los vecinos implicados, “a quienes no se les va a quitar ni un centímetro de lo que se les debía, garantizando así sus derechos como propietarios que un buen día vieron ocupados sus terrenos sin recibir a cambio más que humo y promesas totalmente descabelladas”.
Entre las zonas propuestas para compensar a los afectados, se baraja la posibilidad de ofrecer espacio en los alrededores de la avenida de Grecia, en el área del Botànic Calduch, en el entorno de Maderas Clemente (junto a la carretera de Onda), en el solar que anteriormente ocupaba la empresa Azuvi (en el sur de la ciudad), así como en las manzanas 532 y 533 del PGOU, o en zonas de Espai Vila-real y la Ciudad del Transporte. “Se trata de hacer de esta una ciudad más viable y, además de taponar la hemorragia, como hemos hecho hasta ahora, evitar que se rompa la caja del Ayuntamiento”, indica Obiol.
Benlloch, que ha destacado que la intención es aprobar y comenzar a trabajar con este instrumento este mismo año, ha criticado la utilización de un método “perverso e ilegal” por parte del PP, ofreciendo “aprovechamientos sin ninguna ubicación y sin garantías de futuro, en una gran mentira”, ha denunciado que “en esta ciudad, cada vez que se ha ejecutado algún edificio público, ni se ha pagado el inmueble, ni mucho menos el solar” y ha asegurado que los últimos años del PP “fueron un desmadre”.
Entre los ejemplos de la “mala gestión” de los populares destacan la apertura de la avenida de Francia, el colegio José Soriano, los terrenos de la Escuela Oficial de Idiomas, el jardín de Botànic Calduch, la ronda Suroeste, el Molí la Vila, el jardín de Jaume I o el convenio con las Dominicas. De todos estos casos, de la situación actual y de las medidas a implantar se dará cuenta el próximo día 22, en una jornada “abierta a todos los vecinos”.