Una biblioteca universitaria, salas de estudio para los jóvenes y estudiantes o pequeños boxes que permitan crear un vivero de empresas dentro del ámbito municipal son otros de los proyectos que el Ayuntamiento de Vila-real quiere desarrollar en el edificio de la avenida Pius XII.
El ayuntamiento de Vila-real ha anunciado hoy que va a convertir el edificio de la Biblioteca de Pius XII "en un gran centro del conocimiento y el talento", así lo ha expresado el alcalde de la ciudad, José Benlloch, como son las salas de estudio y formación o despachos enfocados al fomento y apoyo del emprendedurismo.
Para ello, tal y como ha expresado el primer edil, es necesario que la Generalitat Valenciana autorice un cambio de uso de las instalaciones, contempladas como centro bibliotecario en el convenio firmado en el año 2007 para la construcción del edificio, en las próximas semanas el consistorio remitirá al Consell la solicitud para que se autorice en el edificio un uso diferente al de biblioteca.
Deudas del gobierno valenciano
"En junio de 2007 el anterior equipo de gobierno firmó con el Consell un convenio para la construcción de una biblioteca mediante el cual la Generalitat se comprometía a aportar 2,3 millones de euros de los 4,2 millones de euros que costó el edificio en cuotas anuales hasta el año 2012", ha indicado el alcalde. "A día de hoy tan sólo nos han pagado 75.000 euros, es decir, apenas un 3%", ha lamentado Benlloch, que exige a la Generalitat que abone esta deuda con los vila-realenses así como la totalidad de los 13,5 millones de euros que, según el alcalde, adeuda el Consell a la ciudad.
"Precisamente el temor de que no nos pagaran los 2,3 millones de la Biblioteca si cambiábamos el uso estipulado en el convenio es lo que ha ralentizado el aprovechamiento de las instalaciones que hemos diseñado desde el equipo de gobierno dentro de nuestro objetivo de optimización de los espacios municipales", ha señalado Benlloch. El alcalde ha recordado, en esta línea, que para hacer posible el uso como biblioteca previsto por el anterior equipo de gobierno del Partido Popular, "habríamos necesitado un mínimo de 15 funcionarios o concentrar los 8,5 que tiene en la actualidad el servicio cerrando el resto de las dependencias de Bibliotecas".
"Los informes técnicos son contrarios al traslado y desde el equipo de gobierno siempre hemos considerado que ese espacio, que ha costado a la ciudad de Vila-real más de cuatro millones de euros, debería tener más usos que permitan aprovechar al máximo el espacio", ha añadido.
