Ramos asegura que la participación en los actos será muy alta y destaca "la ilusión" que hay entre los vecinos por poder celebrar estas festividades tras dos años
Borriol afronta con "una ilusión muy grande" la vuelta a la normalidad de las fiestas patronales en honor a Sant Bartomeu y Sant Roc. Desde primera hora las calles ya están llenas de gente y el alcalde, Héctor Ramos, se congratula de que "están completamente engalanadas, tenemos muchas ganas de que empiece la fiesta tras dos años sin poder celebrarlas al 100%".
Para ello el consistorio ha reforzado la seguridad. No quieren que vuelvan a ocurrir incidentes como el que se produjo en la Semana Joven, donde una persona resultó herida grave y que obligó a cancelar una de las discomóvil que se iba a celebrar.
Ramos indica que "queremos unas fiestas lo más seguras posibles y para ello hemos trabajado con la policía local y con la Guardia Civil". De esta forma se incorporará una patrulla más de la policía local a la vigilancia durante las fiestas y la Guardia Civil estará también más al loro de los posibles incidentes que puedan suceder durante las celebraciones. También el ayuntamiento ha contratado a una empresa especializada en seguridad privada y ha acotado los accesos a la discomóvil con vallas.
El alcalde explica a Castellón Información que está "muy satisfecho" con la respuesta de la ciudadanía. "Se nota que hay ganas de fiestas porque en la mayoría de actos habrá más de 1.000 personas y en la cena de paiporta, muy importante en el pueblo, unas 1.500".
Por lo tanto, todo listo para que los y las borriolenses puedan disfrutar de nuevo de sus fiestas patronales desde este viernes hasta el 28 de agosto.
