Miguel Bataller. Ciudadano del Mundo y Jubilado.
Por primera vez en mucho tiempo, empiezo a ver en el equipo directivo del Partido Popular unos gestos muy esperanzadores, en relación a sus posturas electorales e ideológicas tanto de cara a las campañas vascas, gallegas e incluso las presumibles catalanas.
La recuperación de Carlos Iturgaiz como cabeza de lista en Euskadi y la opinión vertida por este señor sobre Santiago Abascal, me parece un primer paso decisivo en las relaciones de estas dos personas que coincidieron en los órganos de Dirección de los populares vascos en la época más brillante del PP en Euskadi bajo el Gobierno de José María Aznar, Carlos como Presidente del PP vasco y Santiago como Presidente de las Nuevas Generaciones.
La sintonía personal e ideológica, entre ellos me lleva a pensar en la posibilidad de un Suma España en Euskadi, similar al que se forjó en Navarra, pero esta vez incorporando a Vox junto al PP y Ciudadanos.
No creo que pudieran poder formar Gobierno, pero muy probablemente podrían obligar o bien al PNV o al Partido Socialista de Euskadi a analizar detenidamente sus pactos de Gobierno con los etarras independentistas y los Comunistas de Unidos Podemos, es decir a los grupos anti constitucionalistas del Frente Popular de Euskadi, frente a quienes realmente quieran defender la España Constitucional.
Probablemente se prefiera concurrir a las elecciones por separado, con un PP incorporando a afiliados de Ciudadanos en sus listas en posiciones de salida por un lado y a VOX por otro lado, para conocer su autentica implantación en el País Vasco, pero en mi opinión eso sería un error, ya que posiblemente la suma por separado les pueda restar los escaños necesarios e imprescindibles para tener poder decisorio en la formación de un Gobierno en Euskadi, que puede resultar muy difícil, pero no imposible caso de ir juntos.
Tengo la impresión personal, de que decidan los que decidan, de ahora en adelante en el PP van a cambiar de una manera trascendental sus relaciones con VOX.
Ha llegado el momento de saber tanto en Galicia como en Euskadi (y probablemente también luego en Cataluña) cual es el peso especifico real de VOX y estoy convencido de que muchos se van a sorprender como ya se sorprendieron en Andalucía, Murcia, Madrid y Castilla León y en general en toda España.
En todos esos Gobiernos Autonómicos, si hoy Gobierna el binomio PP-Ciudadanos, ha sido gracias a la generosidad de VOX y a cambio solo ha recibido el desprecio de Ciudadanos y la indiferencia del PP.
Las consecuencias se han visto plasmadas en las Elecciones Generales, donde los naranja se han hundido radicalmente por culpa de su estupidez y su empeño en negar la evidencia, obligando a dimitir a un Albert Rivera que no supo detectar que en definitiva Abascal había sido su compañero de partido en el PP y por lo tanto mucho más cercano a sus ideas, de lo que iban a estarlo nunca unos socialistas que cabalgaban al galope desde la social democracia, al neo comunismo populista de Podemos.
Tampoco el PP gano casi nada con el hundimiento de Ciudadanos, por lo que el pueblo español reforzó de una manera importante a VOX, que sigue sin prisa pero sin pausa su propia ruta de centro-derecha digan lo que digan tirios y troyanos, sin dejarse influenciar por la propaganda nazi-goebeliana del nuevo Frente Popular, ni renunciar a sus principios, pese a la falta de apoyos y comprensión de quienes están condenados a entenderse con ellos, que por momentos parecen verles más como enemigos que como aliados.
La misma absurda autosuficiencia de Feijoo en Galicia, le podría gastar una broma de muy mal gusto, si se produjeran en el seno del PP gallego un exceso de deserciones de decepcionados votantes populares, que decidieran entregar a VOX sus votos.
Un mal menor sería que entre los dos pudieran conservar la mayoría en Galicia, pero un error imperdonable se produciría en caso de no llegar al objetivo de poder formar un Gobierno de Centro-Derecha por el rechazo frontal del Presidente de la Junta de Galicia y del PP gallego, a consensuar una lista que albergara en su seno a representantes de Ciudadanos y VOX, para asegurarse totalmente los escaños suficientes.
A veces el egoísmo personal y la vanidad y autosuficiencia de algunos, la podemos acabar pagando todos los españoles, como lo estamos haciendo ahora en el Gobierno de España.
De todos modos, prefiero ver esos brotes verdes del centro-derecha, basados en la afinidad y amistad personal de Iturgaiz y Abascal, como primer paso de una confirmación de recuperación de la sensatez y el reconocimiento de quienes son nuestros adversarios afines y nuestros enemigos irreconciliables, por defender conceptos radicalmente distintos de lo que es y debe de ser España.
Hasta la semana que viene amigos.