La leche materna constituye la mejor alimentación para satisfacer las necesidades del recién nacido
Castellón Información
Es esencial una correcta alimentación en la infancia para favorecer el crecimiento y desarrollo del bebé. Básicamente, una alimentación equilibrada y hábitos dietéticos saludables constituyen una garantía para un adecuado desarrollo físico y psíquico de los niños.
La leche materna constituye la mejor alimentación para satisfacer las necesidades del recién nacido. Su composición se va adaptando a la fisiología del bebé y no solo aporta beneficios nutricionales, sino también al sistema inmunitario y psicoactivo. Ha de ser “a demanda”, su duración variable, y lo más cómoda tanto para la mamá como para el bebé. Hemos de procurar que sea exclusiva, al menos entre los 0 a 6 meses, y aunque siempre surgen imprevistos, debemos ser previsores para cuando la mamá no pueda dar el pecho a su recién nacido.
Sin embargo, existen circunstancias en las que la lactancia materna no es posible. En estos casos, puede sustituirse por fórmulas infantiles cuya composición son más similares a la leche materna y también cubren todas las necesidades del bebé. Las tomas, tanto en cantidad como en frecuencia, deben ajustarse a lo que necesite el bebé y han de realizarse de igual manera que si fueran lactancia materna. Es importante recordar que todo accesorio utilizado debe lavarse bien después de cada uso y tenerlo preparado para la próxima toma.
Conforme pasan los meses, la leche no es suficiente para cubrir los requerimientos nutricionales y es recomendable iniciar el aprendizaje de hábitos alimentarios. Alrededor de los 6 meses, y no antes de los 4 meses, se pueden ir introduciendo nuevos alimentos, siempre de uno en uno, en cantidades pequeñas y de forma gradual para que podamos comprobar la tolerancia y aceptación.