El técnico del Castellón reconoció que su equipo estuvo mejor en la segunda parte que en la primera. Además, se lamentó del juego duro del Linares y de las faltas a las que fue objeto Rubén Suárez. Y confió en que Castalia lleve a su equipo en volandas el próximo sábado día 31, en el partido de vuelta que será definitivo.
F. F.
Ramón María Calderé, entrenador del Castellón, dijo tras el partido en el campo del Linares que “los cambios que hicimos le dieron vida al equipo en la segunda parte”, para justificar unos grandes segundos cuarenta y cinco minutos. “Tenemos recursos suficiente y en el partido de vuelta haremos cambios porque el equipo del segundo tiempo me ha gustado más”, recalcó el técnico tarraconense.
Hubo un tiempo para cada equipo. En el primero fue mejor el Linares y en el segundo el Castellón. Lanzó un dardo el entrenador. “Hay que saber jugar estas eliminatorias y alguno de mis jóvenes jugadores no han sabido interpretar bien papel”, aseguró. Además, se lamento de que linarenses y castellonenses uno de los dos no logre el ascenso directo en esta primera eliminatoria. “Son dos grandes equipos, campeones de sus grupos, que han demostrado ser de superior categoría”, dijo.
Se lamentó de que su equipo no viera portería en Linarejos. “Es muy importante anotar un gol lejos de casa. Hubiese preferido perder por 2-1, pero no se puede hacer nada. Ha sido una lástima no marcar ninguna de las dos acciones que acabaron con el balón en la madera”, agregó Ramón María Calderé.
Y finalizó diciendo que “estamos capacitados para hacer algo más en Castalia, y el aliento de nuestra afición será fundamental para remontar la eliminatoria”.