El Ayuntamiento podrá optar ahora a subvenciones destinadas a mejorar el turismo de la población
Castellón Información
El Consell de la Generalitat Valenciana aprobaba la pasada semana el decreto mediante el cual ha otorgado la declaración como Municipio Turístico de la Comunitat Valenciana de Càlig. La concejalía de Cultura iniciaba el año pasado (aprobando al pleno de junio de 2017 la puesta en marcha de la petición de declaración) el trabajo para optar a este reconocimiento.
La extensa memoria presentada por la concejalía hacía un repaso exhaustivo de los recursos turísticos existentes al municipio, trabajo y medios que han sido reconocidos en la catalogación obtenida y que permitirán al consistorio el poder pedir y obtener subvenciones de carácter turístico. Así, destacó en el apartado de ‘Patrimonio, edificios y lugares singulares’ la Torre de Càlig, la ermita del Socors y hostelería, la calle de Pont, los antiguos pozos, el convento de la Santísima Trinidad o la iglesia parroquial de Sant Llorenç, entre otros recursos turísticos de la población. También se hacía una cuidadosa mención de los acontecimientos de interés turístico de la población, como por ejemplo las Fiestas Patronales y Tradicionales, así como las de cariz gastronómico.
La concejal de Cultura del Ayuntamiento de Càlig, Ruth Sanz Monroig, se ha mostrado muy satisfecha por la consecución de la declaración y ha afirmado que “desde el inicio de esta legislatura apostamos para sacarle el mejor partido a los atractivos que tenemos en nuestro pueblo”. El edil también apuntó que desde el consistorio continúan trabajando para mejorar el patrimonio y los recursos turísticos del municipio, e indicaba que “en la actualidad estamos trabajando para acabar de restaurar la Torre del Siglo XIII y poder abrir una oficina de turismo en nuestro municipio”.
Càlig identificó su propuesta como destino de atracción turística, como población que, por sus atractivos naturales, monumentales, socioculturales o por su relevancia en algún mercado turístico específico, recibe en un determinado momento del año un número significativo de visitantes en relación a su población de derecho, sin que los mismos pernocten necesariamente en él.