En 2021 se situará alrededor de las 6.700 toneladas, que significa el triple de la de 2020, pero en la media de los últimos años
Castellón Información
La Unió de Llauradors informa que la producción de cereza en la Comunitat Valenciana vuelve esta campaña a la normalidad y a la calidad, tras los problemas climatológicos ocurridos en la pasada, y se situará alrededor de las 6.700 toneladas, el triple de la de 2020, pero en la media de los últimos años.
La temporada anterior, como consecuencia de una climatología muy adversa, la cosecha fue de solo unas 2.140 toneladas, un 66% inferior a la producción normal y en algunas zonas y variedades concretas el descenso fue incluso mayor, hasta del 90%.
A pocos días de iniciarse la campaña en la IGP Cerezas de la Montaña de Alicante, las perspectivas son optimistas, pues se espera, como mínimo, la misma o más producción que hace dos campañas. La calidad es inmejorable y si las condiciones climatológicas acompañan durante las próximas semanas estará garantizada la calidad a largo de toda la campaña. A estas fechas, las fisiopatias asociadas al exceso de humedad apenas representan, en variedades más tempranas de algunas zonas muy concretas, el 1%. Tampoco, a diferencia del año pasado, ha habido problemas relacionados con ataques del hongo de la monilia o podredumbre marrón.
En las comarcas de Castellón, sobre todo en el norte, la campaña va más atrasada, entre 7 y 10 días más tarde que en la pasada, lo que posibilitará un periodo más largo de comercialización y menor sobreoferta, algo que indudablemente se debería convertir en precios mas altos y estables para todos los productores. El único problema se ha dado en las variedades más tempranas (solo representan el 10% de la cosecha total en las comarcas castellonenses), que han tenido un problema de cuajado y la producción, a diferencia de las variedades más tardías, será algo menor, pero aun así muy superior al año pasado.
Las lluvias de estos días en el conjunto de las zonas productoras son muy bien recibidas por los agricultores, porque ayudan a aumentar el tamaño de la cereza, aunque podrían convertirse en preocupantes si se alargan mucho más, ya que empezarían a aparecer problemas relacionados con el exceso de humedad.
La provincia con mayor producción de la Comunitat es Alicante, que concentra el 83% de toda la producción autonómica y que espera una cosecha de unas 5.500 toneladas, lo que significa un incremento de más del 200% respecto a la pasada. Castellón, con el 15% de la producción total, espera una producción próxima a las 1.000 toneladas, un incremento de más del 300%. En la provincia de Valencia, donde la producción apenas representa el 2% de la producción total autonómica, se espera una producción de unas 100 toneladas.