La oposición ha solicitado la comparecencia de ambos concejales en un solo pleno por las contradicciones que plantean
PP y Ciudadanos han registrado peticiones formales para pedir la comparecencia en pleno de los concejales José Luís López, de Urbanismo, y Verònica Ruiz, de Cultura. La estrategia pretende poner cara a cara a los dos ediles de PSOE y Compromís, para depurar responsabilidades sobre la eliminación del mural de Ripollés de la plaza de la Paz, ante la contradicción de sus respectivas alegaciones.
EM/ Castellón Información
PP y Ciudadanos han negociado una estrategia para conseguir un ‘cara a cara’ entre los responsables de los departamentos de Urbanismo y Cultura, para determinar quien de los dos obvió su responsabilidad con la defensa del patrimonio cultural, con la eliminación del mural de Ripollés.
Según el reglamento municipal, cada grupo solo podrá solicitar la comparecencia de uno de los responsables municipales. Pero lo que interesa a PP y CS no es escuchar solo una de las versiones en pleno.
Ante esta situación, hecha la ley, hecha la trampa, el Partido Popular registraba hoy la solicitud de comparecencia del responsable de Urbanismo, y Ciudadanos hacía lo propio para conseguir la de la responsable de Cultura.
Esta comparecencia, seguramente no va a ser inmediata. Es decir, no se producirá en el pleno del jueves, 29 de julio. Aquí el reglamento municipal indica que la petición de comparecencias deberá realizarse con una anticipación de, por lo menos, 10 días hábiles antes del pleno. Si no hay sorpresas por delante, las comparecencias deberán esperar a una próxima sesión. Así las cosas, lo más normal es que las explicaciones de los dos concejales se retrasen al mes de septiembre, ya en que agosto el ayuntamiento suspende la mayor parte de su actividad política… Aunque podría suceder que el pleno se convocara de forma extraordinaria a principios de la próxima semana… Pero esto no sería lo habitual.
La desaparición de los murales del Museo al Aire Libre
(Video sobre el Museo Urbano al Aire Libre de Castelló)
En cualquier caso, el tema que ha dado lugar a estas peticiones formales, no tiene vuelta atrás.
Se centra sobre el Museo Urbano al Aire Libre de Castelló, creado en 1983 para embellecer y dar valor artístico a la ciudad. El ayuntamiento que presidía Antonio Tirado, aprobó solicitar la colaboración de los artistas locales más representativos, para decorar aquellas horribles medianeras que ponían de manifestó el caos urbanístico que había atravesado al ciudad durante las décadas anteriores.
Los artistas no cobraron por su trabajo, pero se mostraron entusiasmados con la idea de exponer su arte en la calle.
El Museo Urbano al Aire Libre sobrevivió durante años a la evolución de la ciudad. No en balde, las medianeras seleccionadas tenían, inicialmente, pocas probabilidades de ser tapadas por otros edificios, en base a las normativas del Plan General de Ordenación Urbana que estaba vigente en la ciudad y del reglamento urbanístico que afectaba a sus entornos.
Aún así, sucedió. Algunos de aquellos murales desaparecieron para siempre. Uno de ellos estaba ubicado en el cruce de la avenida de Alcora con la avenida Vila-rreal, justo detrás del solar donde antaño estaba ubicada ‘Casa Coles’(&), en su lugar, la facha exhibe una enorme llamada publicitaria.
También desapareció el del edificio de la calle Mayor esquina a la Plaza de la Paz, cuya imagen puede verse en una fotografía tomada del video turístico de Castelló.
Otro, el que ha llamado más la atención por el lugar donde se encontraba ubicado, el de la medianera de la Plaza de la Paz. Un cuadro de enromes proporciones ‘Los titiriteros’ de Ripollés, que desapareció bajo una capa de pintura blanca.
Lo más curioso, es que la oficina de Turismo de Castelló es la primera que promueve el Museo Al Aire Libre de Castellón como uno de los atractivos de la ciudad.
Voz de alarma y exigencia de responsabilidades
Una vez que se daba la voz de alarma por la desaparición del mural, Urbanismo y Cultura han presentado versiones contradictorias. ¿Quién omitió su obligación de defender el patrimonio cultural de Castelló? Es de suponer, que Urbanismo, antes de dar licencia de obras solicitara un informe. Y cabría suponer, que Cultura debería haber tomado cartas en el asunto para proteger el mural o dotar a los vecinos del edificio, que solo querían evitar las humedades, de herramientas, fondos y medios para reparar la fachada, pero con el respeto debido a la obra de arte.
Precisamente, por todas estas versiones contradictorias, PP y Ciudadanos quieren escuchar a los dos concejales en el mismo pleno, para que, por lo menos, den sus versiones y se hagan públicas las dos versiones.
Carrasco: "los castellonenses merecen respuestas"
La portavoz del Grupo Municipal Popular, Begoña Carrasco, señalaba al respecto: “Los castellonenses merecen respuestas más allá de las acusaciones mutuas entre concejales del mismo gobierno de Amparo Marco. Si practicaran la transparencia de la que tanto hablan no sería necesario forzarles a dar explicaciones en el Peno, lo habrían hecho a iniciativa propia. Es hora de que den la cara y asuman cada uno la parte de responsabilidad que le corresponda por defender antes sus intereses partidistas que el interés general de todos los castellonenses. Está por aclarar quién dio los permisos para hacer desaparecer un mural con más de 40 años de historia en pleno centro de Castellón”.
Los Populares defienden que, las reparaciones de las humedades en la fachada medianera del edificio de la plaza de la Paz que albergaba el mural de Ripollés, de 600 metros cuadrados, se podrían haber llevado a cabo igualmente conservando el mural, como se ha hecho en otras ocasiones y no dejando que se pierda una de las 200 obras que componen el Museo al Aire Libre que se impulsó en los años 80.
Y añadía Carasco: “Es una vergüenza que por culpa del enfrentamiento entre socios del gobierno municipal se descuide la protección de obras de arte de artistas internacionalmente reconocidos, como Juan Ripollés. Esta es una evidencia más del desgobierno que hay en la ciudad. Un gobierno incapaz de ponerse de acuerdo, es un gobierno inservible a la ciudadanía”.
“Esta mala gestión del gobierno de Amparo Marco, añadía, de debe a que cada socio de gobierno, bien sea el PSOE, Compromís o Podemos están más pendientes de defender sus intereses partidistas que el interés general de todos los castellonenses. Una vez más lo han vuelto a demostrar, unos por otros y, al final, nos encontramos con el peor de los escenarios posibles, sin posibilidad de reparar el daño al patrimonio cultural. Y lo más preocupante de todo es que ni siquiera la propia alcaldesa Amparo Marco sea capaz de poner orden ante tal despropósito”.
&Casa Coles: una posada situada a la entrada de Castellón que se hizo famosa porque daba servicio a los viajeros que entraban en Castellón por la carretera de Alcora. Con la construcción de las vías del ferrocarril y la ampliación de la ciudad fue perdiendo clientela. El edificio estuvo protegido durante muchos años, hasta que dejó de estarlo y se demolió en la década de los 90.
Marín-Buck: “Se pasan la pelota unos a otros pero nadie asume responsabilidades”
El portavoz de Cs, Alejandro Marín-Buck, ha apuntado que “esta polémica aviva de nuevo la crisis en el ‘desacord’ del Fadrell que nunca acaba de cerrarse”. Asimismo, Marín-Buck ha lamentado que Compromís pretenda dilapidar el patrimonio cultural de la ciudad imponiendo sus dogmas cuando se trata de un área que no entiende de colores políticos”.
Por último, el responsable de Cs en Ayuntamiento de Castellón ha manifestado que “la orden de Cultura de derribar la Cruz de Ribalta esta semana tampoco parece ser casualidad cuando existe una crisis abierta entre esta área y la de Urbanismo”. “Había ganas por firmar la orden, sí, mucha, pero algo de venganza, quizá también. Por eso los castellonenses necesitamos explicaciones y en Cs las hemos pedido”
