El senador de Compromís pide modelos menos impactantes y justos con el medio rural y reclama acabar con la presencia de políticos en los consejos de administración de las eléctricas
El portavoz de Compromís en el Senado, Carles Mulet, ha manifestado esta tarde en el Senado su rechazo a la macroplanta Magda, un proyecto solar que cuenta con informes en contra de la Generalitat y que pretende instalar 258.000 paneles y deforestar zonas de cultivo a pleno rendimiento. El senador, que ha defendido una reforma del mercado eléctrico que no sea injusta con el medio rural como lo está siendo por el momento, ha propuesto al Gobierno que se replantee e introduzca los cambios necesarios en el modelo energético, de forma que "la urgencia en la transición energética y el despliegue de las infraestructuras necesarias no impacten sobre el territorio y los seres vivos que lo habitan".
Para ello, ha señalado, "urge una buena planificación, una adecuada evaluación ambiental y participativa", la mejora de la eficiencia energética y la reducción del consumo global de energía "de forma que el nuevo modelo sea ecológico y justo". A juicio de los valencianistas "no puede ser" que las empresas y los fondos de inversión sean quienes marquen la ubicación de nuevas instalaciones de energías renovables. "Huyen del suelo urbano o urbanizable, buscando suelos más baratos, alejados de las zonas de consumo para maximizar beneficios e incentivar procesos de especulación con los proyectos y la tierra", ha manifestado.
Por otro lado, el senador ha reclamado la necesidad de "paralizar de forma urgente" el modelo planteado por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico hasta que se priorice, mediante una planificación real y legislación estatal concreta, una transición energética basada en la eficiencia energética y el ahorro, en el respecto a los ecosistemas, las zonas protegidas y la preservación de la biodiversidad, en los territorios de interior y con una prelación de implantación en suelos degradados, rechazando el modelo propuesto de renovables a gran escala que incentiva la burbuja especulativa, el desvío de fondos públicos europeos, sin planificación territorial, sin participación ciudadana, con la destrucción de la socieconomía local y de los paisajes.
Por último, Compromís ha propuesto al Gobierno que se legisle para acabar con la presencia de actores tan atípicos dentro de los consejos de administración de empresas energéticas como son representantes políticos 'a nómina', donde reciben retribuciones millonarias; donde acaban sus días con un retiro dorado, una rareza que causa malestar y sonrojo difícil de justificar.
"Los sueldos se pagan con los beneficios de las empresas, lo que influye en los costes y tarifas que se cobran a los clientes de empresas como Endesa, Red Eléctrica, Enagás, Iberdrola, etc" y que se obligue a las distribuidoras (Iberdrola Distribución, Endesa Distribución, Unión Fenosa Distribución S.A., HidroCantábrico Distribución S.A.U., E.ON Distribución) a conectar las Comunidades Energéticas Locales, a las que se les está negando sistemáticamente desde hace dos años la conexión a la red con excusas banales y, por tanto, la compensación de sus excedentes.
