"El gobierno de Marco solo es propaganda. Vende unos bonos para la avenida Lidón a los que después solo pueden acogerse tres comercios, apenas una decena si sumamos el resto de calles adyacentes", así se ha expresado la portavoz del Partido Popular en el Ayuntamiento de Castellón, Begoña Carrasco, tras hacerse eco del malestar existente entre los propietarios de establecimientos de la avenida de Lidón que ni siquiera se han podido acoger a la campaña de bonos comerciales específica para ellos. "Es un error del equipo de gobierno, especialmente de la alcaldesa, Amparo Marco, por no escucharles. Lo que necesitan son ayudas directas como venimos reivindicando desde antes de que entraran las máquinas y porque la campañas no se pueden hacer deprisa y corriendo sin contar con los propios los afectados", explica.
Y matiza: "En ningún caso nos oponemos a los bonos comerciales, estamos a favor de estas campañas que se vienen impulsando con la ayuda de Confecomerç, que no tiene culpa de la mala gestión política de este equipo de gobierno. Por supuesto defendemos las campañas de bonos comerciales y que sean mucho más ambicionas, que se doble la cuantía prevista para ayudar al tejido comercial local, pero en este caso, los 50.000 euros que el equipo de gobierno ha querido destinar deprisa y corriendo, a última hora, a la campaña específica para los establecimientos ubicados en la avenida Lidón y adyacentes, ha acabado con una pobre acogida. Algunos de estos comercios de la avenida llevan acumulados más de 100.000 euros en pérdidas por las consecuencias derivadas de unas obras que nadie ha pedido".
La campaña de bonos específicos para los comercios de la avenida de Lidón que ha sacado el equipo de gobierno discrimina a los establecimientos en función de la actividad. "Si bien están todos igual de afectados por las pérdidas económicas ocasionadas por una reforma que ha convertido la avenida en una plataforma de hormigón y no es más verde, ni más accesible, como se anunció, resulta que no admite farmacias, ni estancos, ni casas de comida preparada, ni panaderías, ni centros médicos, ni cafeterías, ni peluquerías. De un total de 17 locales que solicitaron adherirse a la campaña de bonos, solo 3 han podido hacerlo, según nos trasladan los propios afectados", añade.
Carrasco reivindica la necesidad de hacerles llegar ayudas directas, tal y como le han transmitido en cada visita a los comercios de la zona. "Urgen una inyección de liquidez para paliar la pérdida de ingresos. Desde el PP ya propusimos en septiembre que se baremaran las pérdidas de los últimos cinco años y se sufragaran directamente desde el consistorio".
La portavoz Popular apela de nuevo a la sensibilidad de la alcaldesa para ponerse en el lugar de los comerciantes. "Llevan demasiado tiempo soportando dificultades, primero por la pandemia y después por la crisis inflacionista que ha disparado el coste de las materias primas y de los productos en general. Si no contribuimos desde el Ayuntamiento a salvar al comercio de proximidad será el fin de muchos puestos de trabajo directos e indirectos".
"Existe margen suficiente, con los elevados impuestos municipales que se recaudan, para poder ayudar al sector, otra cosa es que haya voluntad política de quienes gobiernan (PSOE, Compromís y Podemos) para hacerlo", concluye.