Consta de 23 artículos escritos por medio centenar de expertos, entre sociólogos, ingenieros, juristas, biólogos, geólogos, antropólogos, profesionales y empresarios
Castellón Información
Esta tarde se ha presentado en Castelló la publicación 'La España rural: retos y oportunidades de futuro', editada por Cajamar y coordinada por Eduardo Moyano, profesor de Investigación del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), en el transcurso de un acto celebrado en la sede social de Cajamar en el que han intervenido asimismo el presidente de Cajamar, Eduardo Baamonde, el profesor de la Universitat de València y coautor de la publicación, Javier Esparcia, y el director de la colección de estudios Mediterráneo Económico, Manuel Gutiérrez.
La publicación consta de 23 artículos escritos por medio centenar de expertos, entre los que se encuentran sociólogos, ingenieros, juristas, biólogos, geólogos, antropólogos, profesionales y empresarios, que analizan los retos que tiene ante sí la España rural y sondean las oportunidades que han surgido como consecuencia de los cambios tecnológicos, culturales y económicos producidos en este siglo XXI, para impulsar el desarrollo de estos territorios desde un punto de vista innovador, sostenible y pluridisciplinar.
El presidente de Cajamar, Eduardo Baamonde, ha destacado que para fortalecer el medio rural hay que trabajar en dos direcciones: "En primer lugar, dotándoles de servicios de calidad que estén a la altura de las expectativas a la que aspiran sus habitantes, principalmente infraestructuras, colegios y centros sanitarios, tarea a la que deben dar respuesta las Administraciones Públicas. Y siendo esta condición necesaria, puede no ser suficiente si no se asegura el futuro crecimiento del medio rural a través de la actividad económica, cuyo desarrollo deben liderar las empresas y los personas, para lo que se precisa contar con recursos y medios a la altura de los nuevos tiempos, entre ellos, la tecnología 5G", apostilló.
Además, Baamonde insistió en las oportunidades que tiene ante sí el medio rural y que sirven de estímulo para que los jóvenes deseen vivir en estos territorios y sustenten el imprescindible relevo generacional. "El sector agroalimentario necesita agregar valor, innovar y diferenciar productos y procesos para que la sociedad reconozca esta diferenciación y podamos tener un sector rentable y atractivo. Surgen también nuevas iniciativas como la bioeconomía, gracias a los avances de la tecnología, que nos van a permitir ofrecer nuevas finalidades, no necesariamente agroalimentarias, ligadas a la actividad del medio rural, así como la economía circular, que va a favorecer la implantación de nuevas empresas en estas zonas".
Por su parte, Eduardo Moyano señaló que las tradicionales diferencias urbano-rurales se han ido diluyendo como consecuencia del fuerte proceso de interacción social y económica facilitado por el avance de las comunicaciones viarias y telemáticas, así como por los crecientes intercambios culturales. "Sin embargo, hay rasgos de los territorios rurales que siempre conservarán su singularidad, como la menor densidad demográfica, la mayor dispersión de su hábitat o su directa relación con los recursos naturales. Unos rasgos singulares que explican las diferencias de desarrollo entre los distintos territorios, como ocurre con el declive demográfico, común a todas las sociedades industriales avanzadas, que se expresa de una forma diferente en los territorios del interior rural".
También mostró Eduardo Moyano su satisfacción porque "hoy los problemas de la España rural ya forman parte de la agenda social y política, situándose en un lugar preferente como nunca lo habían estado antes". Por ello, recordó los criterios que eligió para abordar la situación que están viviendo los territorios rurales a la hora de coordinar esta publicación editada por Cajamar: "Desde una perspectiva abierta e innovadora, explorando el potencial de los territorios rurales para el desarrollo social y económico, estudiando aquellos que se adaptan mejor a los procesos de cambio para aprender de sus experiencias e indagar en las oportunidades que pueden encontrarse para recoger una realidad compleja, diversa y multidimensional, a través de un diálogo cruzado entre los diferentes autores".
Como conclusión, Moyano destacó las medidas recogidas en la Estrategia Nacional frente al Reto Demográfico, que se prevé financiar con fondos europeos Next Generation, que abordan de forma transversal un horizonte a largo plazo, estableciendo "una agenda efectiva de igualdad y cohesión territorial, que incorpore a los pequeños municipios en una recuperación sostenible, digital, inclusiva y con perspectiva de género". Asimismo, abogó por la "necesaria coordinación entre el Estado, las autonomías, las diputaciones y los ayuntamientos" para desarrollar el 'plan de 130 medidas frente al reto demográfico', que aporta más de 4.200 iniciativas para impulsar la transición ecológica y digital, la plena conectividad territorial, el I+D, el turismo sostenible, la igualdad de derechos y oportunidades, el fomento del emprendimiento, el refuerzo de los servicios públicos e impulso de la descentralización, el bienestar social, la promoción de la cultura y las reformas normativas e institucionales.
Por su parte, Javier Esparcia expuso que la perspectiva de la innovación social ha adquirido en los últimos años un renovado y creciente interés en los estudios rurales. "Aprovechar las oportunidades que el nuevo escenario supone para las áreas rurales requiere de iniciativas innovadoras que creen vínculos con los potenciales nuevos pobladores y consigan enraizar su actividad en el territorio", explicó Esparcia, quien a continuación destacó que "en España hay iniciativas socialmente innovadoras en áreas rurales que contribuyen a mejorar la confianza y facilitan el desarrollo de los territorios, además de afrontar algunos de los retos actuales, como el cambio climático y la despoblación".
Para acceder a financiación del programa Next Generation o a los nuevos fondos FEADER y FDR, así como para conseguir mejores equipamientos digitales e implementar nuevos proyectos socioeconómicos, será necesario impulsar una mayor conexión con las redes externas, superar inercias actuales como el clientelismo rural y la ineficiencia, y apostar por un renovado compromiso con la iniciativa local y las áreas rurales en general. "Solo aquellas comunidades más resilientes y con capacidad de reconfigurar sus redes, actitudes y formas de gobernanza, estarán en condiciones de llevar a cabo estas transformaciones tan necesarias", concluyó Esparcia.
460 páginas repartidas en seis capítulos
El libro 'La España rural: retos y oportunidades de futuro' cuenta con 23 artículos que se articulan en seis secciones temáticas:
1. La demografía, la población y la estructura social, que analiza las bases demográficas y poblacionales del espacio rural español.
2. Las representaciones sociales y los nuevos modelos de asentamiento, que reflexiona sobre el mundo rural desde el ámbito de la cultura y la necesidad de renovar la figura de la 'aldea'.
3. Los recursos naturales, el patrimonio viario y la conservación de la biodiversidad, que examina la importancia de los recursos forestales, el auge del uso de caminos, vías pecuarias y senderos por su relación con el ocio y el turismo, y la necesaria conservación y equilibrio entre la fauna silvestre y la población autóctona.
4. Los actores sociales y económicos del medio rural, poniendo el foco en la mujer y su aportación al dinamismo social y económico, los jóvenes agricultores y el necesario relevo generacional, la importancia de la formación en las estrategias de movilidad, las condiciones sociales y laborales de los trabajadores del campo y la tendencia al alza de los nuevos pobladores llegados del medio urbano.
5. Las estrategias de innovación en el desarrollo territorial, que indaga en iniciativas como el programa Leader, la alimentación sostenible, los modelos cooperativos de logística y comercialización, la producción agraria de calidad diferenciada y la industria aeroespacial y de defensa.
6. Las smart villages, que abordan la importancia de la digitalización para el desarrollo de las zonas rurales, para que sea un proceso inclusivo, además de que incluya las herramientas adecuadas para impulsar la modernización del sector agrario y se garanticen los servicios de proximidad a la población rural.