El pleno Extraordinario también aprobó por mayoría el pago de facturas por 1,4 millones, con los informes técnicos en contra
Pleno extraordinario del Ayuntamiento en un intento de ‘ganar tiempo’ para poder incorporar al presupuesto los remanentes de 2022, y modificar créditos por valor de 17 millones de euros destinados, en su mayor parte a gastos corrientes e inversiones. También se ha aprobado por mayoría el pago de facturas por 1,4 millones, con los reparos de la intervención municipal.
El Ayuntamiento de Castelló ha celebrado esta mañana un pleno extraordinario, que se adelanta al ordinario de la semana que viene, para aprobar puntos de índole económica.
Los puntos del orden del día se referían a: una modificación de crédito por valor de 17 millones de euros, y la aprobación de facturas por 1,4 millones con las objeciones de los técnicos municipales.
Lo primero que llama la atención es, si el ayuntamiento no hubiera podido esperar a la semana que viene, cuando se celebrará el pleno ordinario el último jueves de mes. Y el porqué de esta convocatoria extraordinaria.
En este aspecto cabe tener en cuenta, que la modificación de crédito se realiza, fundamentalmente, para incorporar los remanentes municipales del 2022. Pero, además, la necesidad de incorporar esos 17 millones de forma que se puedan gastar todavía dentro de esta legislatura, que finalizará con las elecciones del 28 de mayo.
Una modificación de créditos no es cualquier cosa. Forma parte del presupuesto municipal, los ingresos y los gastos. Y como sucede con el presupuesto municipal ha de seguir unos pasos administrativos que pasan por su aprobación inicial en el pleno, pero también por una exposición al público durante un periodo de 15 días.
Dicho de otra manera, no vale con aprobarla de forma unilateral por el equipo de gobierno, también debe ser sometido al trámite de que se puedan presentar alegaciones.
Esperar una semana al pleno ordinario hubiera supuesto ‘perder’ un tiempo precioso para poder hacer uso de estos dineros. Con el pleno extraordinario de hoy se gana justo eso, tiempo. Si no se presentan alegaciones el equipo de gobierno podrá disponer de estos caudales en un plazo de 15 días (tras su publicación en el BOP), en cuyo caso, la modificación de crédito ya estará aprobada definitivamente y permitirá poder disponer de los fondos desde el día siguiente a su publicación en el BOP.
Pero si se presentan alegaciones, el pleno del ayuntamiento deberá responderlas y en su caso, rechazarlas, lo que también deberá pasar por otra sesión de pleno del ayuntamiento.
Los detalles de la modificación de crédito
Este documento da de baja partidas por valor de 376.279 euros destinadas a la adquisición de material técnico y de seguridad, material de movilidad, vehículos de extinción de incendios, proyectos de extinción de incendios, plan de accesibilidad, iluminación led del alumbrado público, Pla Castelló Verd y proyectos de ciberseguridad.
Este dinero se destinará ahora a: Adquisición de material técnico para extinción de incendios, plan de reforma de espacios urbanos, remodelación de avenida Ferrandis Salvador y obras de rehabilitación de la cámara Agraria (376.279 euros).
Incremento de Crédito por remanentes municipales
Por otra parte, contiene la incorporación de créditos extraordinarios y suplementos de crédito por una cuantía total de 17.014.454 euros, procedentes de la liquidación del presupuesto de 2022 y sus remanentes.
Con cargo a esos remanentes se habilitan dos partidas de recogida de residuos y basuras, y limpieza viaria, por valor de casi 3 millones de euros.
Las otras partidas que se habilitan o se suplementan son las siguientes:
Por destacar los capítulos más abultados o interesantes de la modificación de créditos: incorpora la remodelación de Ferrandis Salvador (a cargo de las bajas de otras partidas). Destina un millón de euros a sufragar los gastos del Patronato de Deportes, e introduce la reforma del Mercado Central (2,5 millones).
Reconocimientos Extrajudiciales de Crédito
En lo que concierne a los conocidos coloquialmente como ‘Rex’ Se trataba de dos puntos que en su totalidad aprobaban el pago de facturas por valor de 1,4 millones de euros.
Se trata de facturas de servicios de contratos caducados, unos porque no se han renovado los concursos de adjudicación y otros porque esa renovación se encuentra paralizada por recursos judiciales. Sobrecargos de servicios contratados por cuantías inferiores a los servicios prestados. Facturas de servicios que no estaban presupuestados…
Los REX, como recordaba Juan Carlos Redondo (PP), son trámites administrativos que deben aplicarse forma excepcional y cuando no hay otra alternativa para hacer frente al pago de proveedores.
De hecho, estas facturas entran dentro de los Reconocimientos Extrajudiciales de Crédito, porque han sido informados negativamente por la intervención municipal.
Además, son modelos que se enfrentan a una disquisición. No deben aprobarse porque tienen informe en contra de los técnicos que velan por las cuentas municipales, pero a la postre, tampoco pueden no pagarse, porque los servicios han sido prestados y los proveedores tienen derecho a cobrar. De lo contrario, la institución incurriría en otra ilegalidad: el ‘enriquecimiento ilícito’.
En resumen, tal como indicó la sindicatura de Cuentas deben ser utilizados de forma excepcional, y no utilizarse forma corriente para saldar las deudas municipales.
El debate del pleno
Los puntos, de la modificación de crédito y de facturas con ‘Reconocimiento extrajudicial de Crédito’ se aprobaron por separado, pero se debatieron conjuntamente. Mucha tela para un solo debate que solo se compensó al incrementar la primera intervención con 6 minutos en lugar de los 5 habituales.
Poco que añadir sobre el debate. La oposición cuestionó la maniobra de la modificación de crédito y los objetivos a los que iba destinada; y afeó al equipo de gobierno por unos REX que el gobierno de Marco criticó hasta la saciedad cuando era oposición, antes de ser gobierno.
Las votaciones y la anécdota
En el turno de las votaciones, una anécdota simpática.
Como era de esperar, después del debate conjunto comenzaron las votaciones. El equipo de gobierno votó en masa a favor de todas sus propuestas.
Pero ojo, cuando llegó el punto de la modificación de créditos, primero se votaba la alegación presentada por VOX y luego la modificación en sí.
Aquí la concejal Isabel Granero, del PSOE, levantó la mano cuando se pronunció aquello de ‘votos a favor de la alegación’. Obviamente se había equivocado llevada por el trajín de las votaciones anteriores. La oposición la miró sorprendida. Y aquí la alcaldesa del dijo: “Señora Granero, no se me pase a la oposición”. Rieron los concejales y Granero bajó la mano.
