Si de 15 mesas se quedan 4 y se reduce la ocupación a la mitad, resultado: cierre seguro
El Ayuntamiento de Castelló desestimará las alegaciones presentadas por cuatro locales de hostelería de la Plaza Santa Clara y, por tanto, promoverá la ruina de los negocios. Los cuatro informes son similares y no hay por donde buscar un resquicio de rentabilidad. Castelló reduce la licencia en mesas y sillas y además aplica la limitación de aforo al 50% de la Conselleria por estado de pandemia. Las cuentas, no salen.
Esperanza Molina / Castellón Información
El pasado mes de octubre de 2020 se daba a conocer la noticia de que el ayuntamiento, por las limitaciones de la zona Zas, remitía a varios hosteleros de la plaza Santa Clara una notificación para la reducción de las licencias de ocupación del espacio público de sus terrazas.
En un año de pandemia, con las limitaciones de la Covid, para la hostelería llovía sobre mojado.
A tenor de las protestas del sector, los responsables municipales se reunían con los hosteleros y llegaban a un principio de acuerdo. Por una parte, el Ayuntamiento retomaría las mediciones de la zona Zas con el objeto de demostrar que no se extralimitaba el nivel acústico para la zona. Y de otra, se comprometía a redactar una nueva ordenanza municipal para evitar la ruina de estos negocios.
Tres de los cuatro negocios recurrieron y presentaron sus alegaciones, asesorados por los mismos representantes municipales.
Meses después ni se han realizado las mediciones de la zona ZAS, ni se ha redactado la nueva ordenanza.
Pero a día de hoy la nueva ordenanza se desconoce, pero, en cambio, los hosteleros ya han recibido la respuesta a las alegaciones. Una respuesta que, de no jugar con el pan de los propietarios bien podría generar carcajadas.
El Ayuntamiento no solo desestima las alegaciones presentadas, sino que insiste en que, en aplicación de la ordenanza que regula la zona, limita la ocupación en número de mesas y sillas, y además, recuerda, que, por las limitaciones impuestas desde la Consellería de Sanidad, el aforo permitido debe reducirse a su vez en un 50%.
La situación viene a ser la siguiente. En el local de la calle Barracas, de 7 mesas se reducen a 5. En Santa Clara, en el primero de los casos: de 15 mesas y 60 sillas la licencia solo le permite 4 mesas y 14 sillas. En el segundo caso, de las 16 mesas y 64 sillas la nueva licencia solo permite 9 mesas y 36 sillas. Y en el tercero de los casos, de las 15 mesas para las que obtuvo permiso, solo le permiten ahora 4, y 14 sillas. Y todo eso con el aviso correspondiente de que, además, deberán reducir su aforo un 50%.
Redondo: “El gobierno municipal da un nuevo ‘hachazo’ a la hostelería
Vistos los cuatro expedientes que se han remitido a los hosteleros afectados, el concejal del Grupo Municipal Popular en el Ayuntamiento de Castellón Juan Carlos Redondo denunciaba el último incumplimiento del gobierno municipal con los hosteleros de Santa Clara.
“Acaban de desestimar los recursos presentados por cuatro negocios que pedían no vincular el espacio de sus terrazas con el interior de sus locales, porque son demasiados pequeños. El propio gobierno municipal aconsejó a los hosteleros afectados que presentaran un recurso para ganar tiempo mientras se tramitaba la ordenanza municipal, es decir, la hoja de ruta que ellos mismos les marcaron la han incumplido.
Y añadía: “Por si no fuera poco lo que le está cayendo a la hostelería, que tras más de 40 días cerrada y sin ingresos y con cero ayudas de las administraciones, el gobierno municipal, lejos de buscar soluciones como se comprometió, les pone palos en la rueda impidiendo que estos negocios sean rentables”, señala Redondo.
El edil Popular recuerda que fue el propio concejal socialista encargado del área de uso del espacio público, Jorge Ribes, quien en una reunión con los afectados hace meses les sugirió a los hosteleros afectados por el reducido aforo interior de sus locales que presentaran un recurso ante el punto de la ordenanza municipal que condiciona el espacio de la terraza a su aforo interior, comprometiéndose éste a resolver el problema de falta de espacio. “La sorpresa ha sido que después de meses, el equipo de gobierno ha desestimado los cuatro recursos que presentaron. El gobierno municipal ha resuelto sus peticiones en contra de las necesidades planteadas por los hosteleros”, apunta Redondo.