La Militia Christi del Maestrazgo fue la encargada de realizar la recreación histórica del aniversario de la ciudad
Con una recreación histórica de lo que debió ocurrir hace ahora 771 años, han culminado en Castelló los actos programados para celebrar el cumpleaños de su carta pobla.
¡Qué mejor que revivir la historia para identificarse con ella!
La capital de la Plana se fundó después de que el Rey de Aragón, Jaume I otorgara un Privilegio de Traslado a su caballero más fiel, Ximén Pérez de Arenós, firmado el 8 de octubre de 1251 en la ciudad de Lérida.
Como ya se ha publicado, no fue el primer privilegio otorgado para la fundación de una ciudad fortificada que consolidara el territorio de El Conquistador. Pero sí fue el que dio lugar al asentamiento de una población, fiel, cristiana, seguidora del rey, para poblar las tierras de la Plana y defenderla de las hordas de los ataques moriscos.
Durante la mañana, la Militia Christi del Maestrazgo ha representado la firma del documento de traslado firmada Por Jaime I el 8 de septiembre de 1251.
El intenso calor y la solana de este domingo ha restado espectacularidad a la recreación.
No ha sido así por la tarde, en la plaza Mayor, que se ha llenado para poder seguir el acto representado por la Militia Christi del Maestrazgo, en la que se representaba el momento en el que el caballero de Jaume I, Ximén Pérez de Arenós entregaba ese documento que dio origen a la fundación de Castelló.
La Militia Christi del Maestrazgo es una asociación cultural que reproduce los usos y costumbres de la antigua orden del Temple.
¿Por qué fue tan importante la orden templaria para Jaime I y la provincia de Castelló?
La Orden del Temple, era mucho más que una orden de caballería. Fue creada en el siglo XII y abolida por el Papa Clemente V a petición del rey de Francia, Felipe II en 1314. Concentraron un inmenso poder, llegó a tener más de 30.000 caballeros con más de 9.000 encomiendas repartidas por Europa.
El papel de los templarios en la provincia de Castellón fue de enorme importancia. Pero para comprender la relación entre El Temple y el Rey fundador de la capital de la Plana, es preciso recordar algunos detalles:
Fueron los templarios los que rescataron a Jaime I de su cautiverio en Carcasona. El niño, con tan solo cinco años, había sido enviado por su padre, Pedro II de Aragón, al castillo de Carcasona, en el sur de Francia, bajo la tutela de Simón de Montfort, como parte del compromiso matrimonial de Jaime I con la hija de su tutor.
Durante aquellos años se había condenado como herejía la práctica religiosa cátara por parte de la iglesia, que dominaba parte de las tierras de Occitania, al sur de Francia, y se inició la cruzada para la erradicación del catarismo. En realidad, el Rey Felipe II de Francia y Simón IV de Monfort, con el apoyo del Papa pretendían conquistar y quedarse con las tierras de la Occitania.
Esa zona pertenecía por vasallaje al Reino de Aragón, lo que enfrentó a Pedro II el Católico y sus vasallos con las tropas comandadas por Simón de Monfort.
Pero en la batalla de Muret moría el rey aragonés y Monfort se negó a devolver al príncipe, heredero de la Corona de Aragón. No fue sino hasta un año después y por mandato del Papa Inocencio III, cuando Jaime I volvió a Aragón entregado a la tutela de los templarios en el castillo de Monzón, donde se formó.
Con 6 años Jaime I fue jurado por las Cortes de Lérida en 1214. Y con la edad de 10 años se declaró su mayoría de edad.
Con enfrentamientos constantes con los señores de Aragón, Jaime I defendió siempre la autoridad de la corona. Recibió el apoyo de los templarios y de otras órdenes como la de los Hospitalarios.
Tras la conquista de las Baleares, se planteó la campaña para arrebatar a los moriscos las tierras de levante. La campaña comenzó en Morella y Ares.
Posteriormente tomaría Burriana en 1233, Luego Peñíscola y el Castell Vell de Castelló. El 9 de octubre de 1238 entraba triunfal en Valencia, que se constituía como la capital del Reino de Valencia.
En todas sus campañas, el Temple tuvo un papel importante, y de hecho promovió el asentamiento de la orden en numerosos municipios de la provincia castellonense. La presencia templaria en la provincia de Castelló quedó reflejada en la serie Territorio Templario, realizada por la Diputación de Castellón y el Canal Historia, también con la colaboración de la Militia Christi del Maestrazgo. Fueron de dominio templario: Culla, Peñíscola, Alcalá de Xivert, Burriana, Les Coves de Vinromà, Albocàsser, La Salzadella, Santa Magdalena de Pulpis, Vistabella del Maestrazgo, Atzeneta, Benassal y Ares de Maestre.
En relación con la carta Pobla de Castelló, en la campaña de Jaime I en las tierras de la Plana, el Castell Vell de Castelló fue crucial para la vigilancia del llano desde la montaña, y para las correrías que añadirían nuevas conquistas a las tropas aragonesas.
Muchas de estas tierras ya habían sido conquistadas por el Cid y reconquistadas por los moriscos tras su muerte. Esa lección la aprendió Jaime I, que no solo se conformó con guerrear por el dominio del territorio, sino que además necesitaba consolidarlo mediante la creación de ciudades fortificadas.
El documento de traslado de Jaume I, en el que concedía a Ximén Pérez de Arenós la autorización para fundar una ciudad amurallada, se firmó en la ciudad de Lérida el 8 de septiembre de 1251. Fue la Carta Pobla de la fundación de la ciudad de la Plana