La falta de vuelos regulares influye en el descenso del número de pasajeros que llegan a la infraestructura propiedad de la Generalitat Valenciana y que en el primer trimestre de 2021 contabilizó 1.777
R. Pardo/Castellón Información
El aeropuerto de Castellón sigue perdiendo pasajeros en este arranque de 2021. En marzo fueron solo 345 los usuarios de las instalaciones de Vilanova d’Alcolea, casi la mitad de quienes las usaron en febrero. Las restricciones a la movilidad que afectan a la aviación comercial se dejan notar en el único aeropuerto público gestionado por la Generalitat Valenciana.
En el primer trimestre de 2021, la base aérea de Vilanova ha recibido a 1.777 viajeros en tanto que el número de operaciones de aterrizaje o despegue contabilizadas fue de 1.259. Enero fue el mes que más volumen de pasajeros llegaron a estas instalaciones, 783, en operaciones realizadas por 335 aeronaves. Curiosamente el mes pasado, cuando más movimientos de aviones hubo, coincidió con el mayor descenso de viajeros, 304 menos que los 649 de febrero, mes en el que se dio el menor número de llegadas o salidas de aeronaves, 276.
La actividad comercial del aeropuerto podría empezar a repuntar, si las medidas para combatir la Covid 19 no lo condicionan, a partir del próximo mes de mayo, cuando la compañía de “low cost” Ryanair retome sus vuelos con el aeropuerto londinense de Stansted. Por ello, los gestores de esta infraestructura consideran que este segundo trimestre puede ser importante para truncar la caída del número de viajeros y retomar la normalidad. Y es que para junio ya se anuncia que la compañía española Volotea reabrirá su ruta a Bilbao, que en 2020 dio buenos resultados.
En un contexto de normalización de la actividad se espera que la aerolínea de bajo coste rumana Wizz Air puede iniciar a finales de este mes sus vuelos con Bucarest, punto de partida para retomar sus rutas con la localidad polaca de Katowice, la capital húngara, Budapest, o con los aeropuertos de Londres Luton y Viena. Serían el relevo al tráfico generado por las llegadas y salidas de los equipos que compiten con los dos clubes de fútbol de la provincia: Villarreal y Castellón.
Mientras, los gestores de la empresa pública Aeropuerto de Castellón (Aerocas) intentan adaptar la base aérea a la situación y apuestan por la diversificación de actividades, contexto en el que se enmarcan las operaciones de mantenimiento, aparcamiento y desmontaje de aeronaves que comparten espacio con las dos escuelas de pilotos que tienen su base en Vilanova d’Alcolea.
