Doménec Nàcher. Secretario técnico de Asaja Castellón.
Vaya la que se ha montado en el sector agrario con la noticia que salió hace dos semanas en nuestra televisión autonómica, cuando informó que un agricultor de Xeraco había sufrido una sanción de la inspección por estar trabajando en su propia finca. No hay nada como contar las cosas a medias para meter el miedo en el cuerpo a todos los jubilados para que no vayan a cuidar sus propios huertos.
Ante todo, tranquilidad. El propietario de la finca o su mujer pueden realizar labores agrarias, siempre que la rentabilidad de las mismas sea debidamente presentada en la declaración del IRPF correspondiente y siempre que al propietario no se encuentre percibiendo importe alguno por desempleo.
Por concretar: El caso del jubilado siempre puede trabajar sus parcelas. ¡Normal! ¡Cómo siempre! Predicarán algunos… pero seamos conscientes que esto no sucede en el resto de sectores y de normal no tiene nada. Un electricista jubilado, abandona su actividad, un maestro jubilado, abandona su actividad, un transportista jubilado, abandona su actividad… y así en todos los casos menos en la agricultura.
Además, todos nos tenemos que concienciar que nuestros huertos son entendidos por la Inspección de trabajo como lugares de trabajo, con la misma consideración que pueda tener un taller, un restaurante o una oficina. El propietario es el responsable de permitir el acceso a su lugar de trabajo (huerto) de todo aquel que pueda no estar de alta en la Seguridad Social, en caso de que inspección detecte irregularidades en trabajadores presentes en nuestras fincas, los responsables somos nosotros por haber permitido y no contrastado antes del acceso, las irregularidades y no haberse opuesto por tanto a que esa o esas personas accedan a nuestro huerto En aquellos casos donde los trabajadores pertenecen a otras empresas ((caso de recolectores)cooperativas, comercios, empresas de servicios, etc…) debemos demostrar mediante contrato que los trabajadores y sus posibles irregularidades, que la responsabilidad no es nuestra y el incumplimiento es responsabilidad de un tercero.
Estos días FEPAC-ASAJA está explicando a sus agricultores en qué condiciones pueden los propietarios y sus empleados acceder a sus parcelas y cómo se debe actuar al tiempo que acreditar la titularidad y el trabajo que se realiza. Por cierto si desea saber lo sucedido en Xeraco, le animo a asistir a una de nuestras charlas y comprenderá lo sucedido. Si tiene alguna duda al respecto no dude en llamar a FEPAC, donde estaremos encantados de atender su duda, como lo estamos haciendo con las que nos llegan diariamente a nuestra sede de Castellón.
