El grupo municipal socialista considera que “Bataller no puede ser alcalde, porque es una mancha para Castellón”. Las nuevas revelaciones sobre “su participación en la trama corrupta del caso Gürtel, con más acusaciones de haber favorecido a la empresa Orange Market, del Bigotes, y otras del entorno de Francisco Correa, hacen que la presencia de Bataller al frente de la alcaldía perjudique la imagen de honradez que deje proyectarse desde las instituciones”, afirma la portavoz socialista, Amparo Marco.
Marco ha reiterado la posición de los socialistas desde que estalló el escándalo, hace casi un año: “Un imputado por corrupción no puede representar a la ciudad como alcalde”. “Bataller ha tenido la oportunidad de defenderse en los tribunales y de explicarse ante los castellonenses y en ninguno de los dos casos ha sido capaz de dejar limpio su nombre”, añade.
La declaración de una testigo en las diligencias judiciales en la pieza 5 del caso Gürtel que se sigue en el TSJ ha revelado que “Bataller, en su condición de subsecretario de Sanidad, firmó contratos con las empresas corruptas una semana antes de recibir las ofertas para realizar unos trabajos. A Bataller se le atribuye haber amañado contratos para adjudicar la organización de un acto en Valencia en 2007 a estas empresas. Ahora se añaden las mismas acusaciones de la elaboración de un vídeo publicitario sobre un hospital de Valencia que costó 47.172 euros”, ha explicado Marco.
“Bataller no puede continuar ni un minuto más en el sillón de la alcaldía porque la Justicia le investiga por presuntos delitos de corrupción y los castellonenses podemos tener dudas también de que si en el pasado gestionó de manera irregular en la Conselleria, puede estar haciéndolo igual en el Ayuntamiento”, dice Marco. “Castellón tiene un alcalde bajo sospecha”, agrega.
La portavoz socialista solicitó a Bataller en el último pleno que compareciera de forma voluntaria en la comisión sobre la transparencia municipal creada hace unas semanas. “Bataller esconde la cabeza en tierra como los avestruces y espera que los ciudadanos no se enteren de lo que pasa en los tribunales. Es una actitud miserable y repudiable”, afirma.
