Tal y como ha confirmado Miguel Barrachina, “En los próximos días mantendremos reuniones con el resto de entidades que se han mostrado interesadas en mitigar los efectos del cierre de oficinas en el interior de Castellón, es decir, con Ibercaja, BBVA y Cajamar”. Estos encuentros, responden a la decisión de la Diputación de Castellón, con el consenso de todos los grupos políticos representados en ella (PP, PSOE y BLOC), de apoyar a las entidades financieras que apuesten por nuestro territorio, por el mantenimiento de aquellos servicios que garantizan la calidad de vida de nuestros vecinos y que a la postre hacen que un pueblo no desaparezca, que florezcan nuevas iniciativas económicas y que se generen nuevas oportunidades laborales para todos los castellonenses.
La entidad bancaria Bankia ha atendido el llamamiento realizado hace unos días por el presidente de la Diputación, Javier Moliner, que remitió una carta a las 10 entidades bancarias con presencia en la provincia de Castellón invitándoles a garantizar el mantenimiento del servicio en los municipios afectados por el cierre bancario, especialmente en los pequeños pueblos del interior de Castellón.
Así, Bankia se ha comprometido a atenuar el efecto del cierre forzado por Bruselas en las zonas menos pobladas de la provincia con la instalación de un ‘ofibús’ que atenderá a la mayor parte de sus clientes en las zonas afectadas por su salida. Tal y como ha explicado el vicepresidente económico de la Diputación, Miguel Barrachina, tras la reunión que esta mañana ha mantenido con el director territorial de Bankia para Castellón y Valencia Norte, Rafael Ferrando, “Bankia se ha comprometido a tener operativo antes del verano este ‘ofibús’ que atenderá a la mayor parte de sus clientes en el interior de Castellón. Esta oficina móvil estará dotada con el mayor nivel tecnológico y de seguridad para permitir el mantenimiento del servicio en estas zonas afectadas por el cierre de oficinas bancarias”.
Además, Bankia se ha comprometido a mantener la instalación de la totalidad de los cajeros automáticos con los que cuenta actualmente y, en función del uso que se haga de ellos, sustituirlos en los próximos meses por ‘cajeros inteligentes’ que permitan a los usuarios realizar gestiones como los ingresos en metálico, el pago de tributos, la actualización de las libretas de ahorro y otras prestaciones adicionales que hasta ahora no se realizaban.
