“La Diputación es una entidad con gran prestigio en el mundo financiero, tiene crédito, algo que está al alcance de muy pocos. Cada paso que damos implica un mensaje de confianza que ahora tiene su recompensa”, ha explicado el presidente de la Diputación. Este dinero para que los ayuntamientos paguen tanto sus nóminas como a sus proveedores está disponible en un plazo aproximado de dos semanas. Pero no solo eso, también se ha agilizado este año la tramitación de los poys, para que los ayuntamientos y mancomunidades que quieran presentar sus proyectos para que se incluyan en el citado Plan tengan de plazo hasta el 15 de febrero de 2013. De esta forma, la Diputación liberará los fondos durante el primer semestre para que los ayuntamientos hayan podido ejecutar las más de 220 obras previstas antes de que finalice el ejercicio. “Es la hoja de ruta de la Diputación para ayudar a reactivar los ayuntamientos. Es el momento de empezar a recoger los frutos del trabajo bien hecho y poner esos frutos a disposición de la sociedad y de nuestros ayuntamientos”, explicó Javier Moliner durante la presentación de los presupuestos de 2013.
El presidente de la Diputación de Castellón, Javier Moliner, ha cumplido su compromiso de tener disponible y operativo el presupuesto de 2013 ya el uno de enero, de tal manera que se puedan seguir atendiendo de forma regular y sin demora los pagos tanto a los ayuntamientos como a los proveedores. Hay que tener en cuenta que a comienzo de año es cuando necesitan más disponibilidad financiera, por lo que Moliner, como ya hizo el año pasado, ha agilizado los trámites para tener disponibles desde el primer día del año los 119,8 millones de euros presupuestados.
El pasado viernes, 27 de diciembre, se elevó a definitivo el expediente de aprobación del presupuesto de 2013, después de no recibir ninguna alegación durante el periodo establecido para reclamaciones. Las cuentas previstas para 2013, como ha asegurado Moliner, “reflejan un cambio de ciclo de la Diputación y de la provincia. Es un punto de inflexión que podemos afrontar gracias a la consolidación de los ajustes y que responden a una nueva forma de hacer política”.
Hay que tener en cuenta que, después de años con cuentas restrictivas, el trabajo de gestión y control del gasto han permitido plantear un aumento presupuestario de más de tres millones de euros y un incremento del 2,6% de las inversiones productivas y más de 5,5 millones de euros adicionales para los municipios. Como ya ha asegurado el presidente, “la Diputación debe dar un paso atrás para que la sociedad civil de un paso adelante”.
En estas cuentas se refleja una reducción de 1,2 millones en los costes de personal tras mantener “nuestra política de amortización de plazas y cero oferta de empleo publico” y que supone un acumulado de más de dos millones de euros en dos años. Así, hay una reducción de cerca del 10% en esta partida, al bajar su peso en el conjunto del presupuesto del 23,5% en 2012 al 21,5% el año que viene.
Este control del gastos y una mejor disposición de los recursos permitirá incrementar en 5,5 millones de euros las transferencias a los ayuntamientos para mejorar tanto sus servicios como sus infraestructuras. Pero, además, Moliner ha anunciado la creación de un fondo de contingencia para emergencias de los ayuntamientos dotado con un millón de euros.
Además, el esfuerzo de la institución provincial en la devolución de la deuda le ha permitido aligerar un 34% su carga financiera por el pago de intereses de cara al año que viene. Así, está previsto cerrar 2013 con una deuda de 103 millones de euros tras la devolución de otros 16 millones, lo que supondrá una reducción del 26% respecto al inicio de esta legislatura, en que la deuda de la Diputación ascendía a 140 millones de euros, tanto con las entidades financieras como con el Estado, fruto de los sobrepagos que hizo en la época del Gobierno socialista de la pasada legislatura.
También anticipará en enero 36,4 millones a los ayuntamientos
Pero, además, Javier Moliner ha cumplido otros compromisos para facilitar el acceso a la liquidez de los ayuntamientos a comienzo de año, como ha sido el de disponer de 36,4 millones de euros ya en enero para anticipar a los municipios los ingresos por el cobro de tasas e impuestos, que en muchos casos no tendrían hasta finales de verano. Precisamente, hace apenas diez días, la mesa de Contratación de la Diputación aprobaba la operación de crédito por la que los bancos llegaron a ofrecer 48, 4 millones de euros, pese a que solo se habían solicitado 36 millones, lo que demuestra que confían en la solvencia de la Diputación para que pueda hacer de banco bueno para los municipios.