Javier Más Torrecillas. Doctor y profesor de Historia Contemporánea de Universidad.
No es una fecha cualquiera. Es el 9 de marzo de 1810. Madrid, como casi toda España tiene su 2 de Mayo. Castellón tiene su 9 de Marzo. Fue un acto espontáneo, democrático, un grito a la libertad, a la igualdad, a la revolución. Una lucha con sangre, con valor, sin medios. Una lucha contra el tirano, contra el opresor, contra un ejército armado. Y murieron personas, vecinos, ciudadanos. No fue un día más, fue el día de la libertad en la historia contemporánea de España, de Castellón. Y eso, a pesar de que a algunos, como a los concejales del Bloc, o a los socialistas de Villarreal, se niegan a darle al pueblo, al verdadero, al que no se deja someter por ellos, lo que es del pueblo.
Ciento cincuenta vecinos de Castellón, Almazora y Vila-real murieron heroicamente luchando contra la caballería del general Suchet, el día 9 de marzo de 1810. Hoy, la Asociación Gregal, el Ayuntamiento de Castellón, el de Almazora, la Diputación, el Consell, el Ministerio de Defensa, diversas asociaciones culturales de Castellón, la Iglesia, sindicatos, músicos, … han decidido recordar ese heroicismo de libertad.
La memoria de aquellos que dieron su vida por nuestra libertad, por nuestra democracia, por la Constitución de 1812, la más amplia jamás vista en España, no debe desaparecer. Es un ejercicio de memoria histórica, de la buena, de la que avanza en positivo. Un ejercicio de lucha contra la opresión, sea política, económica o ideológica. Es un ejercicio de dación hacia los demás. Deberíamos aprender de aquellos centenares de personas, vecinos de las tres ciudades, que con palos y cuchillos se enfrentaron a un ejército armado y a caballo. ¿lo harían hoy Ustedes?
