Alejandro Moreno. Psicólogo. Educador. Cooperación Internacional.
Leyendo los diarios del fin de semana emprendí ayer a hacer elucubraciones numéricas, votos por diputados. Cinco diputados para Castellón. La tradición dice que se reparten en una relación de 3 a 2, tod@s para el bipartito. Ahora, creo que para ganar se necesitaría un mínimo de 40.000 votos. Quiénes pueden alcanzar ese mínimo?
Restándole al PP. Ciudadanos le restará, lo que le reste le dará la oportunidad para alcanzar 1 diputad@. Restarle al PSOE. Quien le restara? Aquí comienza el galimatías. Podemos si se alía con Compromís, y mantienen los votos que obtuvieron últimamente, pueden doblegar una gran ventaja, si suman, multiplicaran. He calculado 70.000 votos y tienen la posibilidad de batir de lleno, hasta con 2 diputad@s, y como restarían al PSOE, este reduce a 1 diputad@, Igual que el PP y C's. Ya tenemos los 5 repartidos.
Sigue el Galimatías. Muchos hemos apostado por la unidad, la convergencia, etc. y aparecen múltiples opciones unitarias. Ara en Comú Castelló (Ahora en Común Castellón) es una de ellas en Castellón y en todo el País Valenciano. Al que se ha sumado abiertamente EUPV y algunos movimientos sociales y personas
independientes de otros partidos y organizaciones.
Pero hay un problema. Los votantes de EUPV más los otros, si se motiva a la gente
como una opción, no superarían los 20.000 votos, tal y como están las cosas en el mercado electoral.
Por lo tanto, la única opción para aportar a la debacle del bipartidismo, y ganar, es multiplicar con quienes tienen la probabilidad de romper, por lo tanto concluyo que en Pais Valencià, la opción de unidad debería ser, según las propuestas y las líneas rojas marcadas, multiplicar con algo así como un ‘Podemos amb Compromís en Comú’. Y aun así quedaría una distribución de 2-1-1-1. ‘Pot ser, es es’ (según lo que veo) mi quinielas electoral o mi hipótesis ‘polito-lógica’ si no hay una opción unitaria y se siguen ofreciendo plataformas unitarias al ‘por menor’, esto no
funcionará. Todo esto sin entrar en análisis ideológico-tácticos.
Si queremos echar a los responsables de este ‘empastre’ económico-político-social para la clase trabajadora, para el pueblo llano y para la gente honrada, no queda otra que ser prácticos y menos egocéntricos.
Quien esté al frente que se someta al poder de la confluencia que construya otra sociedad alternativa y de cambio real para las mayorías.
