Antonia García Valls. Portavoz del PSPV en el Ayuntamiento de la Vall d'Uixó.
Estos días estamos asistiendo a muchas noticias que nos escandalizan por lo que suponen y porque nos desaniman a los que, todavía, creemos en las personas, en la sociedad, en las instituciones, en los valores, en los derechos humanos.
Imputaciones “reales” y no “reales”, fiscales que “enjuician” a jueces, Cotino, Castedo, Ortiz, Bárcenas, contratos “falsos”, pagos con dinero público en contra de todos los informes técnicos y económicos, etc.…
Noticias que nos abruman y que, en demasiadas ocasiones, no dejan tiempo a la reflexión serena y tranquila. Y por tanto a no valorar ciertos aspectos que, en otro momento, quizás les hubiéramos prestado más atención.
Siempre defendí que, durante los Gobiernos de Zapatero, con errores y aciertos, sin duda, se tomaron dos decisiones que fueron muy buenas y que no fueron “vendidas” a la ciudadanía en su justo valor e importancia.
Una fue el empeño, trabajo y constancia y, por tanto, la adopción de decisiones y medidas para reducir la siniestralidad en nuestras carreteras y disminuir el número de víctimas que cada semana ensombrecían las noticias de los lunes. Y se consiguió. Con el esfuerzo y la concienciación y por tanto, la responsabilidad a la hora de conducir, de toda la sociedad. Pero el trabajo no se abandonó ni un minuto. Y desde aquí quiero mencionar a Pere Navarro, que desde su responsabilidad pública, puso todo su esfuerzo y trabajo para conseguir el objetivo. Y los datos están ahí.
Desgraciadamente, los datos de los últimos meses están cambiando la tendencia positiva de reducción progresiva de las víctimas de la carretera. Posiblemente los cambios en las políticas llevadas a cabo no son los adecuados. Deberíamos reflexionar sobre este extremo y quizás no revocar medidas que daban buenos resultados simplemente porque haya cambiado la responsabilidad política.
Y la otra cuestión es la reforma que se llevó a cabo en RTVE. Los datos de audiencia, premios, prestigio no voy a mencionarlos, porque también están en la hemeroteca y en la memoria de muchos. La garantía de pluralidad, libertad informativa y transparencia también dio buenos frutos.
El resultado de haber vuelto a las andadas, (recordaremos a Urdaci y CCOO, en vez de Comisiones Obreras, como anécdota), de haber vuelto a hacer de la televisión pública, la televisión de partido de una manera absolutamente descarada, ha hecho que los niveles de audiencia estén bajo mínimos. Y si la solución del PP es nombrar a otro supervisor de contenidos que no respete los códigos de la comunicación, mal vamos, muy mal.
Hoy la noticia es que cierran Teledeporte…. ¿Qué será lo próximo?
Es muy lastimoso que el revanchismo político impere por encima del interés general, de los buenos resultados y de la consecución de objetivos. Si no cambiamos esta manera de actuar, vamos muy mal, muy mal.