Juan Teodoro Vidal. Químico.
No creo que haya una medida más impopular que esta del cambio de hora. No se a quien se le ocurrió, parece como lo del banco recién pintado, que nadie recuerda quien puso el letrero. Creo que es una medida absurda, que todos los que podrían abolirla la mantienen porque es políticamente correcta.
Me parece una injerencia inaceptable del poder político. La hora de salida y de puesta del sol no obedece a leyes humanas, sino a la posición relativa del Sol y de la Tierra. Los cambios de hora legal parecen querer enmendar la realidad, de forma repentina, no paulatina como hace la naturaleza. Nuestros gobiernos están demasiado acostumbrados a querer que todos hagan lo que ellos deciden. Cambiar la hora es una osadía, como si la naturaleza les tuviera que obedecer.
En cuanto al ahorro, el sentido común nos dice que el termo, la cocina, la calefacción, la nevera, la lavadora, el aspirador van a consumir lo mismo y la iluminación, que es más sensible a los horarios, se activa cuando falta la luz del sol: las farolas siguen esa pauta. En los hogares lo mismo. Y en los trabajos la iluminación raras veces depende de la luz solar, sino que se emplea iluminación artificial.
Tampoco se justifican los trastornos que causa. Nos obligan a levantarnos una hora antes en primavera y verano. Los primeros días estamos cansados y de mal humor, hasta que se acostumbra el cuerpo. Además hay que cambiar la hora en todos los relojes, teléfonos, despertadores, radios... Una docena de artefactos en cada casa. Algunos relojes son valiosos y no ganan nada con estas manipulaciones.
Si aún así fuera realmente efectiva la medida para reducir consumos, ¿no sería más razonable cambiar el horario? Bastaría con adaptar los horarios de apertura y cierre, pero dejando las horas legales en paz.
Y lo de los apagones ¿qué? Dicen que es para salvar el planeta ¿De qué? Durante el apagón del sábado 29 de marzo parece que se consumió un 5% más de energía que el sábado anterior. No sirve ni de símbolo. De hecho aunque se consiguiera ahorrar en el consumo, ¿qué es lo correcto? ¿Volvemos al neolítico? En esa época se consumía realmente menos energía. Son todo posturas que en la práctica culpabilizan actitudes y pensamientos que son resultado del progreso. Sospecho que acabarán justificando algún nuevo impuesto para que paguemos así por la culpa inducida.