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jueves, 21 de noviembre de 2024 | Última actualización: 19:57

Reglas del juego

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Marisol Linares. Ex diputada del PP.

Los países democráticos se caracterizan por tener una convivencia pacífica al acatar unas reglas del juego que son aceptadas mayoritariamente por todos los ciudadanos. En España nuestras reglas están recogidas en la Constitución.

Las elecciones del pasado 10-N están dejando a la luz pública que son muchos los partidos políticos que quieren quebrantar las reglas del juego y por tanto, romper nuestra convivencia. El principal jugador de esta partida es el Señor Sanchez que miente y engaña a los españoles como si fuese un trilero, pues su acuerdo con los independentistas está cerrado desde el primer minuto.

Un presidente que rompe esas reglas y que, utilizó una moción de censura para alcanzar el poder por la puerta trasera, apoyándose en partidos independentistas y pro etarras y que ahora lo vuelve a hacer y se abraza a un partido como Podemos que aboga por un nuevo proceso constituyente para abolir la monarquía, no puede ser el presidente de España.  Con esos mimbres, que no respetan las reglas del juego que nos dimos en la transición, será muy difícil dirigir este país hacía la prosperidad y la convivencia social.

Por estos motivos sería bueno hacer una reflexión en profundidad y pensar que quizás ante este bloqueo institucional sea  necesario cambiar esas reglas, para no depender de partidos que quieren acabar con el marco constitucional, y sin duda me refiero a la ley electoral que a mi modo de ver es la causa principal que ha provocado la situación por la que pasamos actualmente.

Si todos los votos valieran lo mismo en el territorio nacional no estaríamos ante una numerosa representación de partidos independentistas cuyos intereses son sus territorios y no la nación, y que sin embargo están condicionando desde hace muchos años la gobernabilidad de España.

Es el momento de que el PP y el PSOE piensen en España y en su futuro, y no en intereses partidistas, porque a la larga ambas formaciones son necesarias para hacer de España un gran país y evitar una crisis como  la actual que nos pone en una situación crítica como  nación. Cambiar la ley electoral nos ayudaría a sentar unas bases sólidas para el futuro de España.