Marisol Linares. Ex diputada de Les Corts Valencianes.
Tras casi dos meses desde que se celebraron las últimas elecciones municipales y autonómicas, como dice la canción ‘La vida sigue igual’. Eso sí, los nuevos dirigentes se han estrenado en sus cargos con algunos gestos. Esto es lo que les identifica a los partidos de izquierdas, a la gente ‘progre’, pero de ‘forment ni un gra’.
Tres días le han durado las bicicletas al Sr. Ribó; un día, el desahucio al Sr. ‘Kichi’ y un día el pacto de la Sra. Carmena con los empresarios para hacer de ‘la formación dual’, su propuesta estrella, una medida que en la Comunitat Valenciana ya es una realidad gracias al gobierno del PP. La Sra. Carmena vendió estrellas para poder llegar al ayuntamiento de Madrid y se ha estrellado con su aterrizaje. Carmena que califica los desahucios de “escándalo social” ahora en 2015, no se acuerda que hace más de 20 años, siendo juez decana de Madrid, no sólo duplicó los desahucios -36 desalojos diarios- sino que alardeaba de ello.
Con sólo catar los sillones del poder, los ‘anticasta’ han abandonado sus propuestas populistas para defender la realidad: siguen utilizando coche oficial, eligen a los asesores de su propia organización y además ‘enchufan’ a sus maridos y familiares con sueldazos que “clama al cielo”.
Eso sí, la Sra. Colau dice que qué culpa tiene el padre de su hijo para no ser el elegido y digo yo: “que culpa tenían los familiares de dirigentes del PP para que fueran atacados de forma furibunda”.
Señores, memoria histórica y predicar con el ejemplo. Pero no, todo lo contrario, ahora ya no se habla de desahucios, ni de enchufismo, ni de privilegios de la casta…..
Y mientras tanto, la gente sigue estando en la lista del paro -del que únicamente se preocupa el PP- que mes tras mes consigue que más gente se incorpore a la vida laboral. También el Partido Popular es el único que consigue un crecimiento económico, reconocido, por los organismos nacionales e internacionales y que dan a España una evolución superior a la media de los países de Europa.
El PSOE, por el contrario, se limita a criticar la buena dirección de la política económica que está llevando el gobierno del PP. Lo único que le importa es pelear por el poder allí donde puede rascar algo aunque sea pactando con formaciones independentistas y extremistas para dirigir paradójicamente ayuntamientos y CCAA habiendo perdido estrepitosamente las elecciones del pasado 24M.
Por tanto, esta nueva casta que utiliza la ley del embudo: ancho para ellos y estrecho para el PP, están demostrando con sus gestos y acciones que lo que prometieron a los ciudadanos no es fácil de cumplir, entre otras cuestiones porque una cosa es gestionar y otra predicar con demagogia y populismo barato.
Y, la prueba más palpable está en el pueblo griego que ha tenido que tragarse el no y claudicar ante una Europa que aboga por solidaridad a apoyar al pueblo griego pero al que se le exige responsabilidad por parte de sus dirigentes.
El Sr. Tsipras ha tenido que entender que él sólo no puede. Por más teoría y más demagogia que tenga su partido no puede sacar a Grecia de la situación en la que la ha metido. La gente empieza a entender que con discursos y palabras no se come y hace falta algo más que dialéctica para que los griegos puedan llevar una vida más normalizada si no quieren convertirse en un país tercermundista.
Y, en esta Comunitat, la vida sigue igual. A la espera de que el PSOE y Compromís saquen la varita mágica que les permita cumplir con todo aquello que prometieron. De momento han subido el número de altos cargos dentro de la administración, la conselleria de Turismo ni está ni se le espera en Benidorm y, qué decir de la apertura de RTVV. Habrá qué hacer auditorías, pedir informes, etc….en definitiva la vida sigue igual y los ciudadanos una vez más deberán recapacitar para qué ha servido su voto.
Mientras, en solitario el PP y Mariano Rajoy siguen trabajando para bajar los impuestos, para acortar las listas del paro y para conseguir que España siga creciendo.
