Miguel Prim Tomás. Ex Parlamentario Nacional.
Escribir en un mes que para muchos es de vacaciones resulta ¿complicado? Si repasamos lo que aquí he escrito hasta el momento, hay una palabra que puede definir ahora más que nunca la realidad: ‘turbulencias’ y claro, para muchos las turbulencias parecen temas de ‘aguafiestas’ para las vacaciones. Y es que, después de haber escrito mi artículo último, ve uno claro que los ‘bipartitos’, ‘tripartitos’ o más, están a la vista más de ello que otra cosa. Véanse sino los Ayuntamientos de Madrid, Barcelona, Valencia, Pamplona, etc.
Pero el año electoral, del cual hacíamos un comentario en otro artículo, se va a recargar de las ‘turbulencias’ con los comicios catalanes del próximo Septiembre. El empecinamiento del President con su tétrico juguete del secesionismo es ya abracadabrante. Yo creo que al final el votante catalán se dará cuenta que en España no nos merecemos, a estas alturas, el espectáculo que se está dando por parte de ciertos políticos que aún no se sabe (¿o sí?), que persiguen. Esta ‘turbulencia’ no nos conviene a nadie, o quizás a un sector tan minoritario que más vale que se acaben ya los capítulos del melodrama.
El año electoral va a acabar como una gran ‘mascletà’ de nuestras fiestas mayores: las Elecciones Generales. Pretendo aquí hacer unas breves consideraciones. Una de ellas: ¿Cómo se puede decir que el PP se está haciendo más de derechas, cuando el PSOE ha demostrado una radicalización hacia la izquierda al apoyar a otros partidos con tal de que no gobierne el PP?
Esto, que es toda una realidad, hace pensar que ello se ha conseguido ‘gracias’ a que el PP no cambió la norma electoral de gobernar el más votado. Hubiera en el caso de las pasadas elecciones de Mayo favorecido a la fuerza de Centro-Derecha de este país. Pero en otra ocasión, porque no puede favorecer al Centro-Izquierda.
Otro tema, que aún no he podido detectar y he repetido en muchas ocasiones, es que tanto el PSOE como el PP, en temas de Estado, no han hecho ninguna aproximación. ¿No será uno de los motivos por el que la ciudadanía se ha alejado de los políticos y ha buscado castigarlos votando a otras siglas? Esas ‘turbulencias’ que al principio comentaba, pueden ‘hincharse’ si al final, por culpa de no acceder a lo que el ciudadano demanda, se decantan a ‘cantos de sirena’, que pueden empeorar aún más nuestra ‘dolorida’ democracia.
No voy a repetir los problemas que a nivel Estado los hay, para mejorar nuestra vida social y política, si hubiera un consenso y diálogo para abordarlos conjuntamente. El progreso consiste en la paz social y económica, y en eso las principales fuerzas políticas tienen la palabra.