Óscar Clavell. Alcalde de la Vall d'Uixó.
Ayer inauguramos, con un gran concierto de las tres bandas y los seis coros de la Vall d'Uixó, el Edificio Cultural Leopoldo Peñarroja. Fue un día histórico para nuestra ciudad y para los valleros que se merecen esta infraestructura que será de referencia en la Comunitat Valenciana y que será sede de la Escuela Oficial de Idiomas.
Cuatro años de paralización durante el gobierno de PSPV y EUPV, los constantes votos en contra de la izquierda a este edificio y, por último, el recurso de Esquerra Unida para intentar paralizar la apertura, son el resumen de la importancia que la izquierda le da a la cultura en nuestra ciudad.
El pasado miércoles asistimos al espectáculo más bochornoso de aquellos que quieren para la Vall d'Uixó, y parece que anhelan según oímos en sus intervenciones, la cultura de la carpa.
Cincuenta minutos dedicaron PSPV y EUPV a intentar justificar que siempre han estado “totalmente en desacuerdo” con este singular edificio, como así consta en un acta de 2009. Y son palabras textuales del que fuera alcalde de esta ciudad por el Partido Socialista.
Cincuenta minutos, que resumen los años que han estado entorpeciendo a la cultura y a la educación de nuestra ciudad.
La izquierda no ha creído nunca en esta infraestructura, no quieren que la Vall d'Uixó esté a la vanguardia en cultura y disponga, como nos merecemos los valleros, de un edificio con capacidad para acoger espectáculos de primer nivel.